La consejera de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, comprometió ayer la voluntad de la Junta por seguir ampliando los derechos de las personas con discapacidad en Andalucía.

Así lo señaló durante el encuentro que mantuvo en Huéscar (Granada) con la Asociación de Padres de Personas con Discapacidad Intelectual, Física y/o Sensorial Aspadisse, que cuenta con un total de 220 personas asociadas y que está dedicada desde 1983 a la recuperación e integración social de este colectivo.

Sánchez Rubio subrayó el compromiso de la Junta por mejorar las condiciones de vida de las personas con discapacidad, una "prioridad", dijo, que desarrollarán en colaboración con el movimiento asociativo.

La consejera consideró fundamental el apoyo a las asociaciones que representan a este colectivo, integrado actualmente en Andalucía por más de 542.000 personas con un grado de discapacidad igual o superior al 33% reconocido por los Centros de Valoración y Orientación (53.703 de ellas en la provincia de Granada).

Andalucía, dijo, es de las pocas comunidades autónomas que cuenta con una ley específica de Atención a las Personas con Discapacidad, de carácter transversal y aprobada en 1999 para dar respuesta a las necesidades de este colectivo.