No quisieron dejar sola a la familia y unos 600 vecinos de la barriada de La Paz acompañaron ayer a los allegados y amigos de Joaquín padre y Joaquín hijo desde la zona Norte a la Subdelegación del Gobierno para clamar justicia y exigir una respuesta contundente del juez  contra el detenido por, presuntamente, acabar con sus vidas el pasado 28 de febrero.

Con grandes pancartas y con sus propias voces denunciaban el hecho de que una persona que había sido detenido unas semanas antes por disparar contra otra familia y que tenía antecedentes policiales estuviera en la calle tan ricamente. Tanto es así, que los manifestantes habían reunido firmas en apoyo a la familia para entregárselas al juez que lleva el caso y pedir que se cumplan las condenas para que no se repitan sucesos de este tipo.

Juan Heredia, presidente de la Asociación de vecinos de La Paz, expresaba el sentimiento de indignación que hay en el barrio "ya que esto no ha sido una reyerta, ha sido un asesinato". Heredia comentaba que es una pena que por "tonterías" de este calibre puedan acabar con la vida de personas. No en vano, recordaba que, independientemente de las rencillas del pasado entre los implicados, el inicio de la última pelea había comenzado por un "televisor prestado".

Además de para pedir justicia por los fallecidos, los vecinos, con su marcha, reivindicaban la implicación del barrio ante los hechos violentos. "No nos gusta que esta imagen se asocie con nuestro día a día, allí vivimos bien y nadie se espera que pasen estas cosas y que de repente acaben así", comentaba una de las vecinas. El presidente de la asociación añadía que este tipo de sucesos crean cierta inquietud y una sensación rara en la zona "pero, en esta ocasión, estamos contando con mucha presencia policial tanto de día como de noche por lo que estamos más tranquilos".

Lo cierto es que el fallecimiento del padre y el hijo dejó conmocionado al barrio. Nadie se esperaba que el Día de Andalucía pudiese acabar en tragedia y así fue. Los hechos ocurrieron sobre las 16:50 horas frente al portal número 1 de la plaza Rey Badis de la zona Norte. Según relató el Centro de Emergencias 112, varios vecinos llamaron alertando de que se estaba produciendo un altercado en la zona. Vieron a varias personas y escucharon los disparos.

Cuando los agentes y los servicios sanitarios llegaron al lugar de los hechos se encontraron a Joaquín hijo ya cadáver, mientras que su padre falleció cuando era trasladado al hospital. Según las primeras indagaciones, el primer disparo fue dirigido al hombre de 37 años cuando éste, tras discutir supuestamente con el detenido, bajaba las escaleras del edificio para salir a la calle. El padre salió al escuchar los gritos y fue cuando recibió el otro impacto de bala.