Responsabilidades judiciales pero también políticas. El Partido Popular entiende que la instrucción del 'caso Alhambra', que ha investigado irregularidades en el control de accesos y venta de entradas a este monumento nazarí ubicado frente al barrio del Albaicín y sobre el Río Darro, demuestra la existencia de una "trama" y un "descontrol" por parte de los gestores del recinto y exigirá explicaciones en el Parlamento.

La vicesecretaria general de los populares granadinos, Marifrán Carazo, se refirió ayer así al auto de procedimiento abreviado, hecho público hace dos días y en el que el juez da por finalizada la instrucción e imputa a un total de 77 personas, en su mayoría trabajadores del Patronato de la Alhambra y relacionados con las funciones de este órgano de gobierno. Carazo exigió responsabilidades políticas por este asunto y anunció que su grupo lo llevará a la Cámara autonómica a través de una batería de iniciativas para que pueda ser debatido en las Comisiones de Cultura, de Economía y de Turismo.

De acuerdo a las palabras de la vicesecretaria popular, la causa ha puesto de manifiesto el descontrol, la falta de sensibilidad y la "nefasta" gestión de la Junta de Andalucía en este importante espacio cultural y turístico de Granada que, desgraciadamente, añadió, está capitalizado desde la ciudad de Sevilla.

Por su parte, el portavoz del Partido Popular en Granada, José Torrente, se preguntó cómo pudieron perderse más de 50.000 entradas durante el período investigado sin que la "administradora de la finca" se enterara, con el consiguiente perjuicio millonario que eso ha supuesto. Por contra, lamentó que, desde el Patronato que gestiona la Alhambra y la Junta de Andalucía, se nieguen a aceptar la propuesta del Ayuntamiento de Granada, gobernado por el PP, de destinar dos euros de la entrada al monumento para mejorar el histórico barrio del Albaicín. La última vez que coincidieron el alcalde de la capital, José Torres Hurtado, y la directora del Patronato alhambreño, María del Mar Villafranca, el máximo regidor granadino volvió a insistir en esa medida. "Estoy seguro de que se va a hacer y ya anuncio yo que esos dos euros de cada entrada se acabarán destinando al Albaicín", declaró ante la negativa de Villafranca.