La sanidad, a debate

Razones de peso contra la obesidad en aumento

  • En la cuarta conferencia del ciclo patrocinado por la Fundación Repiso, el profesor Mataix propone soluciones racionales a la ya considerada epidemia del siglo XXI

SON preocupantes los malos hábitos alimenticios de nuestras sociedades, en las que tanto sobra pero en las que no somos capaces de encontrar el equilibrio. Más bien al contrario, aumentan las enfermedades crónicas provocadas por el exceso de peso: patologías cardiovasculares, diabetes y otras enfermedades, como apnea del sueño, trastornos musculoesqueléticos e infertilidad. Además, la obesidad está considerada la segunda causa de mortalidad prematura potencialmente evitable, después del tabaquismo. Las cifras de los afectados van en aumento. La revista American Journal of Preventive Medicine publicó en octubre de 2004 que las líneas aéreas estadounidenses gastaron 275 millones de dólares en combustible extra para compensar la carga adicional de los pasajeros, que había aumentado con respecto a los diez últimos años. En 2005 la Administración Federal de Aviación incrementó la estimación del peso medio del viajero de 77 kilos a 82.

En España las estadísticas son alarmantes: según la última Encuesta Nacional de Salud, el 52,68 por ciento de los adultos tiene sobrepeso (37,43 por ciento) u obesidad (15,25), con una mayor incidencia en los varones, y 500.000 niños entre dos y diez años, tienen ese problema. El número de niños con sobrepeso se ha duplicado y el de adolescentes se ha triplicado. Esto provoca iniciativas para fomentar una alimentación sana, como los programas de la Consejería de Salud andaluza implantados desde 2004 en las escuelas. Es una forma más de reducir la obesidad, que acarrea consecuencias psíquicas irreparables, como censura en el entorno familiar, rechazo de los compañeros y baja autoestima.

Prueba de la preocupación institucional por la obesidad en los jóvenes es el estudio Evasyon, que se desarrolla en cinco provincias españolas, entre ellas, Granada. Unos 40 adolescentes (entre 13 y 16 años) con exceso de peso participan en el Clínico de este programa que les ofrece educación nutricional para disminuir su índice de masa corporal. Uno de cada tres niños andaluces entre 10 y 12 años y el 42 por ciento de las niñas tienen ese problema, que también afecta al 21 por ciento de la población frente al 15 de la media nacional.

El panorama sanitario tampoco es muy alentador. La obesidad cuesta cada año a la sanidad pública 2.500 millones de euros, el 7 por ciento del gasto sanitario. Más de un centenar de personas se operaron el año pasado en el Clínico (80) y en el Virgen de las Nieves (28). Un tratamiento médico eficaz podría ahorrar miles de euros y evitar cada año 25.000 operaciones.

En la sanidad pública se atienden casos de obesidad mórbida, pero existen centros privados donde estas intervenciones son un negocio que mueve millones. A cambio, la Asociación del Defensor del Paciente recibe anualmente unas 20 denuncias por intervenciones de reducción de estómago con resultado de muerte.

Sin embargo, hay quienes no acuden a un endocrinólogo para reducir peso por razones de salud, sino por estética. Atraídos por dramáticos eslóganes del tipo 'pierda kilos, sonría a la vida' o 'cambia tu vida ahora mismo', píldoras adelgazantes, fármacos dudosos y otros mejunjes se anuncian sin pudor junto a consejos básicos y sencillos para perder peso de forma razonable. Es como si todos ellos hubiesen hecho un master acelerado de fisiología y conociesen al dedillo cada caso, ofreciendo falsas dietas y tratamientos. Y por si fuera poco, multinacionales como Kellog's y Nestlé son denunciadas por promover malos hábitos alimentarios en los niños.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios