Granada

Realejo: un día de respiro en el territorio comanche

  • El barrio vive una jornada festiva sin coches dentro de la iniciativa 'Vive tu calle' enmarcada en la Semana Europea de la Movilidad

Los vecinos del Realejo pudieron ayer salir de su portal sin temor a ser atropellados por una de esas motocicletas que se toman la movilidad por su mano e invaden las aceras para sortear los atascos. La propuesta Vive tu calle, enmarcada dentro de la Semana Europea de la Movilidad, sirvió ayer como banco de pruebas para testar cómo sería un barrio peatonal y sirvió para que los vecinos disfrutaran, sin malos humos, de la música, el deporte, la artesanía y actividades infantiles en calle Molinos y el Campo del Príncipe.

El experimento se celebró en un momento en el que el Ayuntamiento está celebrando reuniones con vecinos y colectivos en busca de soluciones que acaben con los problemas de tráfico, entre ellas la de reducir el tamaño de los autobuses de los colegios que llevan y recogen a los estudiantes de la zona y que provocan atascos a diario. Esta vía, que soporta cada fin de semana picos de hasta 4.000 personas, también tiene graves problemas de movilidad. En concreto, lo que se puso sobre la mesa en la reunión celebrada esta semana fue llevar a cabo un proyecto de calle inteligente para abrir y cerrar el tráfico según las necesidades.

La experiencia sirvió para experimentar cómo sería el barrio si fuera peatonalAyuntamiento y vecinos están estudiando fórmulas para aliviar el denso tráfico

Un paseo por esta zona evidencia que también es muy necesaria la pacificación del tráfico. Por aquí, a las decenas de peatones, se suma la presencia de microbuses, taxis, vehículos de vecinos y de turistas con acceso al barrio gracias a su hospedaje. El caos, como ocurre en el Realejo entre semana con motivo de la actividad de los centros educativos y de la presencia de turistas y residentes motorizados, es total. De momento las prioridades del área pasan por buscar soluciones para el Realejo. Así, según detalló, otra de las propuestas es que los autobuses descarguen a los niños en el Paseo del Salón. En la primera reunión celebrada esta semana ya se presentaron varias propuestas. En el encuentro, algunos vecinos se mostraron partidarios de que los autobuses escolares no accedan hasta el interior del barrio y se coordine al alumnado para que acceda a los centros a pie.

De momento, mientras se concretan estos planes, el Realejo fue ayer un territorio idílico en el que poder pasear sin la incómoda sensación de poder ser arrollado por una moto.

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