Un plan de refuerzo con un 50% más de agentes reforzará la seguridad y la vigilancia en las zonas de fiesta de Granada capital de cara al próximo puente del Pilar. Esta es la medida anunciada por el Ayuntamiento de Granada en voz de la concejal Raquel Ruz. Entre otras cuestiones se pretende controlar que los locales de ocio nocturno cumplan con sus licencias y los botellones incontrolados en la ciudad, sobre todo para evitar los excesos que se cometieron el año pasado durante estas fechas y que provocaron la peor oleada de contagios de coronavirus semanas después, y cuyas consecuencias se extendieron hasta casi la Navidad.

Ruz apuntó a que el nuevo gobierno de la ciudad hizo "un plan de botellón" nada más llegar al poder porque "sabíamos que iba a ir a más y que las restricciones se iban a ir relajando". "Diseñamos y estudiamos los puntos más calientes y hemos creado una comisión mixta con Medio Ambiete e Inagra para cuando detecten residuos de botellón lo comuniquen a la Policía Local y tener a los agentes prevenidos", explicó la concejal.

Así que de cara al próximo puente del Pilar se reforzará el operativo normal en más de un 50% de agentes "para dar respuesta a las actividades que suponemos que se van a desarrollar". Este refuerzo será con agentes de la Policía Local y la Nacional. "Es muy necesario porque muchas veces la Policía Local no puede llegar, no solo por falta de efectivos, sino por competencias a ciertas acciones, y lo lógico es que actuemos de forma conjunta", explicó Ruz.

"También tenemos diseñado para esta semana un plan para la actuación en las terrazas que están ilegalmente o excesivamente situadas en la zona de Ganivet y Moras", añadió Raquel Ruz, que dijo que los propietarios ya conocen la medida y que se actuará en consecuencia "en los próximos días.

"No queremos que vuelvan a repetirse las imágenes que dieron la vuelta a España el pasado puente del día del Pilar, el desmadre en plena pandemia en calle Ganivet", sentenció la concejal.