Los empresarios turísticos de Granada confían en que el refrán que apunta a que los años de nieves son siempre años de bienes contenga algo de verdad. Sierra Nevada, que este año está superando todas las previsiones y que está haciendo historia con una campaña sin precedentes, se ha convertido en los últimos meses y gracias a las abundantes nevadas registradas en los meses de diciembre y enero, en la principal esperanza de los hoteleros granadinos.

Con el recuerdo aún reciente de los malos resultados registrados al comenzar el año -aunque no será hasta dentro de unos días cuando el Instituto Nacional de Estadística publique los datos oficiales de ocupación de enero, las referencias nacionales y las estimaciones de las asociaciones de hoteleros apuntan a que ha sido uno de los peores meses de los últimos años-, los empresarios turísticos han depositado gran parte de su confianza en el exitoso binomio que forman Sierra Nevada y el buen tiempo.

Desde que hace unas tres semanas las lluvias y el frío dejaran paso a los días soleados y templados, los hoteles granadinos han mejorado sensiblemente sus niveles de ocupación. Si el Día de San Valentín hizo colgar el cartel de 'completo' a los establecimientos hoteleros de Sierra Nevada y de la capital, el Día de Andalucía y las excelentes condiciones de la estación de esquí -este fin de semana se habilitarán 101 kilómetros de pista esquiables- han asegurado a los hoteles una ocupación media del 80%.

El presidente de la Federación de Empresas de Hostelería y Turismo de Granada, Julián Martín, aseguró ayer que este fin de semana, sin ser tan espectacular como el de San Valentín, está "bastante animado" desde el punto de vista de la ocupación. "No vamos a conseguir grandes récords, pero aunque las perspectivas no sean las más halagüeñas sí permitirán recuperar los flojos resultados de la semana pasada", explicó el presidente de la Federación.

El secretario y portavoz de la Asociación de Empresarios de Alojamientos Turísticos de Granada y Provincia (Hospedaje), Rafael Piñar, añadió que de haber caído el Día de Andalucía en viernes o en domingo, este fin de semana volvería a llenar todos los hoteles de la capital y de la estación de esquí. "Al caer en sábado, no se va a notar demasiado. La ocupación va a ser buena, pero no espectacular", indicó Rafael Piñar.

La capital, donde el nivel de ocupación de las plazas hoteleras se situará en torno al 75 o al 80%, no será la que más beneficiada salga del Día de Andalucía. El turismo de nieve volverá a ser predominante y dejará en los hoteles de la estación una ocupación cercana al 90%. Fuentes de Cetursa, la empresa que gestiona la estación de esquí, confirmaron que ayer las previsiones apuntaban a un grado de ocupación del 85%, pero que las reservas de última hora podrían elevarla hasta el 90%.