Los estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Granada (UGR) pasarán por el test serológico antes de iniciar sus prácticas en centros educativos de la provincia. Así lo confirmó el vicerrector de Estudiantes y Empleabilidad de la UGR, José Antonio Naranjo, que especificó que esta medida se recoge en el protocolo que aborda cómo se desarrollarán estas prácticas en este atípico curso, marcado por el coronavirus y los planes de contingencia.

Antes del inicio de las clases presenciales en colegios e institutos, Educación y Salud determinaron que todos los docentes y personal de centros pasarían el test serológico. Esta medida también se aplicó antes de la celebración de las pruebas de acceso a la Universidad del mes de julio y en el inicio del programa de refuerzo estival. En total, unas 16.000 pruebas. Por otro lado, más de 5.400 profesores y plantilla de administración y servicios de la UGR también pasaron por esta criba. Únicamente en siete casos se derivó a una PCR para confirmar posibles casos de Covid.

Los alumnos de prácticas van a los centros educativos de lunes a viernes y tienen que cumplir un mínimo de 300 horas presenciales

Ahora, estas pruebas serológicas se extiende, según Naranjo, a los estudiantes que realicen prácticas en centros educativos. Estas prácticas forman parte del programa curricular de los grados que se imparten en Ciencias de la Educación. Comenzarán previsiblemente a mediados de octubre y el alumnado se distribuirá en los centros docentes que hayan solicitado su adhesión al programa de prácticas. En el prácticum I, que comienza el mes que viene, cuenta con unos 900 alumnos inscritos, mientras que en el II, se incluye a otro millar de estudiantes de Ciencias de la Educación. En total unos 2.000, que desarrollarán sus prácticas en los próximos meses de forma gradual. Cada periodo de prácticas se extiende a lo largo de un cuatrimestre.

El prácticum, que permite a los estudiantes de Ciencias de la Educación cómo funcionan los centros educativos, se define como "la asignatura más compleja pero también la más completa de la formación que el estudiantado recibe en sus estudios de Grado". El futuro maestro observa el contexto, conoce el centro y tiene la oportunidad de poner en práctica sus conocimientos con casos concretos. El prácticum  I cuenta con 300 horas presenciales en los centros a partir del tercer curso del grado, mientras que el II suma 360 en el octavo semestre del grado. Los alumnos van cinco días a la semana a los colegios o centros colaboradores. En este año, con la creación de las unidades de convivencia estable, el desarrollo de las prácticas ha tenido por fuerza que adaptarse también a los protocolos de seguridad. Dentro de esa adaptación está el desarrollo de más test serológicos.