La Universidad de Granada se ha fijado como prioridad la búsqueda de fondos económicos a través de las vías no convencionales, entendiendo como tales, aquellas ajenas a las Administraciones que habitualmente sostienen el mantenimiento de la institución académica. En esa línea, la colaboración con las empresas privadas y las entidades financieras es vital para la UGR, que ayer tuvo un día importante por la visita de representantes del Banco Santander. La rectora, Pilar Aranda, ya avanzó públicamente antes de la reunión que iba a plantearles nuevas vías de colaboración para reforzar el apoyo que actualmente brinda esta entidad a la UGR.

El director adjunto de Santander Universidades España, Alfredo Albaizar, encabezaba ayer esa delegación del Banco, que asistió a la presentación de la nueva convocatoria para el curso 2015-16 de las becas Santander de prácticas profesionales para universitarios en pymes.

En el acto, el representante de la entidad financiera recordó la larga colaboración con la Universidad de Granada desde hace más de 16 años en diversos proyectos. El Santander ha aportado ayudas para la digitalización de fondos, programas de movilidad en países como Rusia o Marruecos, la Universiada, el Campus de Excelencia Internacional o varias cátedras.

La UGR es una de las entidades gestoras del programa de becas que el Santander tiene para que universitarios puedan realizar prácticas en pequeñas y medianas empresas, además de para autónomos. Ya se han puesto en marcha 5 ediciones de este programa, que tuvo una gran acogida en 2011 y desde entonces el Santander amplió y consolidó.

Para el programa de este curso, la Universidad de Granada contará con 108 becas, unas a tiempo completo y otras a media jornada. Los estudiantes pueden incorporarse a esas pequeñas empresas durante 3 meses con una remuneración económica total de 1.800 euros, que aporta el Santander. Lo que supone que para esta edición se destinarán unos 150.000 euros para los estudiantes de la Universidad de Granada. Éstos tienen hasta el 31 de este mes para inscribirse en el programa.

En los años que lleva esta iniciativa en funcionamiento en Granada se han beneficiado de ella unos 556 universitarios y una cantidad similar de empresas pequeñas del entorno.

Esta iniciativa favorece la futura inserción laboral de los estudiantes, mediante ese contacto real con el mercado. De hecho, Santander tiene encuestas que revelan que casi la mitad de los estudiantes becados continúan después en esas empresas, ya sea a través de otras becas o con contratos laborales. Este dato se refiere a toda España, pero sus responsables sostienen que es asimilable a la situación de Granada.

Juan Antonio Moya, uno de los alumnos de la UGR que ha disfrutado de una de estas becas, dijo ayer que sus prácticas le han dado la oportunidad de "aprender a trabajar en equipo" y han sido una "motivación para seguir buscando empleo acorde". Han sido tres meses "cortos pero intensos", a su juicio.

Pero la iniciativa también beneficia a las pequeñas empresas, que pueden incorporar así capital humano bien formado. Laura Maraver, responsable de Red de Telecomunicaciones, una de las empresas beneficiadas, explicó que esta sociedad ha mantenido a su becario y que es una "oportunidad importante".

La rectora de la UGR se mostró muy satisfecha también con los resultados de estas becas y recordó la colaboración actual con el Santander en ámbitos como el emprendimiento (Programa Yuzz), la cultura científica o el desarrollo digital. Pero agregó: "Tenemos que seguir trabajando en esta línea de colaboración con nuevos proyectos", como la captación de talento.