El grupo de investigación de Seguridad Vial de la Facultad de Psicología de la Universidad de Granada está desarrollando un pionero estudio con el que se pretende desvelar el grado de conocimiento de las normas de circulación de los ciudadanos a nivel nacional.

El trabajo dirigido por el profesor Francisco Martos -con la colaboración del Instituto de Tráfico y Seguridad Vial de la Universidad de Valencia- surge como una demanda de la Confederación Española de Autoescuelas tras el estudio realizado hace unos años por el mismo grupo de investigadores sobre el nivel de conducción en personas mayores de 50 años.

"Comprobamos que el conocimiento que tenían las personas de edad avanzada sobre el código de circulación se había deteriorado, hasta el punto de que si fueran examinados de nuevo tendrían una puntuación de entre 1,5 y 2 puntos sobre diez", según explicó el codirector del estudio.

"Una persona de 50 años -que nadie consideraría mayor para dejar de conducir- podría haber obtenido el carné hace 32 años (con 18 años), pero continúa cogiendo el coche y nadie le ha obligado a reciclarse", según indicó Martos.

No se trata sólo del deterioro psicológico que sufren las personas con el paso del tiempo -que puede provocar el olvido de determinadas reglas-, sino también de la aparición de nuevas normas de circulación, de seguridad o de señalización. "Cuando comenzaron a construirse hace unos años las rotondas, se quedó obsoleta una de las reglas básicas de la conducción: ceder el paso al vehículo de la derecha", según comentó el profesor de la Facultad de Psicología, lo que originó problemas de adaptación a algunos conductores, con la consecuentes situaciones de peligro.

El mecanismo que seguirán los responsables del proyecto consistirá en realizar una encuesta en la que se reproduzca un examen estándar de la DGT a la ciudadanía. En total, Martos espera que se realicen unas 10.000 entrevistas a nivel nacional, entre las que habrá medio millar en la provincia de Granada.

En estas encuestas -que se están acometiendo actualmente- se tendrán en cuenta distintas variables: el género del conductor, el tiempo que hace desde que obtuvo el permiso de conducir, el país, comunidad autónoma y provincia del entrevistado, si el encuestado coge el coche habitualmente (diariamente) o no (una o dos veces por semana) y si se trata de un conductor profesional (camioneros, taxistas, chóferes de autobús...).

De este modo, los investigadores podrán cruzar datos para conocer si las mujeres retienen mejor lo aprendido en la autoescuela, si el tiempo es un factor determinante en relación con el desconocimiento de la norma o si los conductores profesionales y los habituales -al enfrentarse con asiduidad a la carretera- conocen mejor el código de circulación, según añadió Martos.

Aunque los resultados del estudio aún se desconocen, el codirector del mismo expresó que espera que los datos sean "muy reveladores", demostrando de este modo que "cuando pasa el tiempo el nivel de conocimiento de la norma es muy bajo".

Esto a su vez plantearía un problema social en el que, según indicó Martos, "sería conveniente que los organismos competentes adopten algún tipo de medida dirigida hacia la reeducación o reciclaje, así como sistemas para confirmar que los nuevas normas que la DGT va incorporando son conocidas.

Asimismo, si las cifras que arroje el estudio son negativas también debería ponerse en cuestión la eficacia del examen de conducir. "En este caso podríamos concluir que el contenido de la prueba teórica no recoge los aspectos más importantes de la conducción pues, si la mayoría de los conductores se les ha olvidado el código de circulación debería haber muchos más accidentes de los que finalmente se producen, teniendo en cuenta que son muchísimos los desplazamientos de vehículos que se realizan durante un día, según aclaró el responsable del trabajo.