Granada

La Universidad se compromete a no tocar el modelo de Selectividad

  • Remite instrucciones a los centros para "disminuir la incertidumbre" sobre cómo será el acceso a los grados el próximo curso

Las puntuaciones también se mantendrán en las próximas pruebas.

Las puntuaciones también se mantendrán en las próximas pruebas. / . g. h.

Será lo mismo, aunque todo puede cambiar. La Comisión del Distrito Único Andaluz ha remitido una nota informativa a los centros educativos para "disminuir la incertidumbre" de cara a cómo será el acceso a la Universidad el próximo curso académico. Es precisamente en estos días cuando los alumnos que en septiembre se incorporarán a segundo curso de Bachillerato realizan sus matrículas y eligen las asignaturas, las que cursarán durante el curso académico y de las que se examinarán en junio de 2018 en la remozada Selectividad. La incertidumbre y la tardanza en publicar la normativa de la prueba han sido dos de los grandes lastres que han tenido que soportar alumnos, familias y docentes en el pasado curso. El bajo porcentaje de aprobados en la última Selectividad (89,1%, cuando lo habitual es superar con holgura el 90%) es el único dato cuantitativo que se puede destacar tras meses de idas y venidas en el reglamento de la prueba.

Con el fin de poner cerco a la "incertidumbre" del pasado curso, la Comisión del Distrito Único Universitario de Andalucía aclara que los procedimientos de acceso y admisión a los estudios de grado "se realizarán bajo la filosofía de Distrito Único", lo que garantiza que el alumnado "será tratado en pie de igualdad" con independencia de su lugar de procedencia. Sobre las materias de las que se examinarán los futuros universitarios, se indica que "serán las mismas que las establecidas" para el curso que acaba de terminar. No es un asunto menor. Al inicio del curso pasado, varias asignaturas estaban directamente 'descolgadas' de la prueba de acceso a la Universidad, como el Francés. El desarrollo de la normativa andaluza (que se prolongó hasta el mes de abril) permitió que esas asignaturas que en un principio no entraban en la Prueba de Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (PEBAU) volvieran a ser materia de examen.

Se reconoce que podrá haber "leves cambios" en la estructura de los exámenes

En cuanto a la estructura de la prueba, la Comisión se remite a "las orientaciones actualmente disponibles". Eso sí, las posibles modificaciones de esta estructura -con la aplicación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) llegó a plantearse que fuera tipo test- quedan pendiente del "análisis de los resultados de la prueba en este curso 2016/2017". Este análisis podría llevar a "aconsejar en alguna materia leves cambios". La nota remitida a los institutos señala que en el caso de que hubiera cambios éstos "estarían disponibles en la primera quincena de octubre de 2017", y que "en ningún caso" los temarios de las materias se verán afectados. Los cambios serían en el modelo de examen, no en los contenidos, recogidos en la orden que desarrolla el currículo de Bachillerato.

Otra de las claves que la Comisión apunta a que se mantendrá inalterable un año más serán "las ponderaciones". Los exámenes se puntuarán igual que en la última Selectividad.

El mismo documento reconoce que, pese a la intención de las universidades andaluzas de mantener el modelo de prueba de acceso un año más, no es el organismo competente para regular la normativa sobre los procedimientos de acceso. En cualquier caso, se apunta a que "se intentarán respetar en todo lo posible" las normativas actualmente vigentes.

La nueva Selectividad se desarrolló el pasado mes de junio como una copia fiel de la anterior Prueba de Acceso a la Universidad (PAU). Sin embargo, las demoras en la regulación de la prueba -primero por la interinidad del Gobierno central y posteriormente por las sucesivas reformas que la Lomce que dejaron sin efecto algunas de las medidas más polémicas, como las reválidas- lastraron el desarrollo del curso académico para los alumnos de segundo de Bachillerato. El vacío generado por la cohabitación entre la anterior Ley Orgánica de Educación (LOE) y la Lomce ha propiciado situaciones como permitir el acceso a la Universidad sin pasar por Selectividad a los alumnos repetidores de segundo de Bachillerato.

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