La rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda, se sinceró en la presentación de los informes de egresados y del mercado laboral. La rectora, tras conocer los datos aportados en los dos informes, apuntó a la necesidad de que los universitarios reciban "preparación psicológica" para asumir un mercado laboral cambiante, en el que la expectativa de un puesto de trabajo 'para toda la vida' es cada vez más irreal.

Los datos apuntan a que la temporalidad es un elemento que echa raíces. En cualquier tipo de titulación la tasa de temporalidad supera el 90%, y destaca el porcentaje que se da entre los doctores (96%). También es elevado entre los egresados de los másteres (93,7%), graduados (95,2%) y para los recién titulados bajo las figuras de licenciatura y diplomatura (91,8%). "La temporalidad es algo a lo que hay que habituarse", incidió la rectora.

El presidente del Consejo Social de la Universidad de Granada, Gregorio Jiménez, quiso ejemplificar su opinión. "Vamos al mundo que yo llamo del cine y la literatura". A cada obra literaria o trabajo cinematográfico debe seguir otra tarea, una nueva producción.

Otro de los aspectos sobre el que la rectora se pronunció fueron las prácticas. Los datos apuntan a que son el principal canal de acceso al mercado laboral y en ese terreno la Universidad de Granada ha avanzado un mundo en las últimas dos décadas. Aranda comparó los inicios del programa de prácticas, con 40 estudiantes beneficiarios en el año 90, con los más de 3.000 que este curso han cruzado este 'puente' entre las aulas y las empresas. "Estamos obligados a las prácticas externas", incidió Aranda, que destacó la importancia del entorno laboral para que los estudiantes puedan completar su formación fuera de la facultad de una manera provechosa.

Antonio Delgado, director de la Unidad de Orientación Profesional y Empleabilidad, incidió en la necesidad de "sensibilizar" a las empresas sobre el beneficio de acoger estudiantes en prácticas, un llamamiento que, desde la UGR, se puede extender a buena parte del territorio nacional dada una de las singularidades de la Universidad. El 50% de los estudiantes de la UGR son de fuera.