No tiene por ello que temblar el barrio ni que temer por su puesto en la lista del Patrimonio Mundial, pero lo cierto es que el Albaicín recibirá en el primer trimestre de 2009 la visita del director general del Centro del Patrimonio Mundial de la Unesco, Francesco Bandarin. Así lo anunció ayer, en declaraciones a este periódico, el presidente del Centro Unesco de Andalucía en Granada, Miguel Carrascosa, que considera "urgente" esta visita.

No se trata de que exista una alarma sobre el estado del barrio que provoque este trámite, sino más bien que el Centro Unesco de Andalucía considera oportuno que el director general "vea lo que se ha conseguido hasta el momento... y lo que no", en palabras de Carrascosa, que sí concretó que el examen del que será objeto el barrio se plasmará en un informe de su situación. Este documento podría servir, por ejemplo, para justificar la petición de fondos europeos, aunque llegado el momento, también podría suponer algún tirón de orejas a las instituciones que intervienen en el barrio, si Bandarin observara actuaciones inapropiadas.

En este sentido, Carrascosa recordó que no se debe perder en ningún momento de vista que "no se trata de un barrio más" y que no se puede, por ejemplo, "meter asfalto en un barrio así". Se refería con estas palabras a la polémica surgida cuando Urbanismo introdujo este material en la reforma de algunas calles del barrio. Aunque posteriormente el propio Consistorio rectificó tras las recomendaciones de Cultura y explicó que la confusión se había generado porque no existen unas pautas claras sobre los materiales que se pueden emplear.

Si bien ese desencuentro pareció llegar a buen puerto, está por ver si el director general aprueba las conclusiones a las que se llegaron. Asimismo, será de gran interés ver si se pronuncia respecto a otra gran polémica abierta en torno al Albaicín y el patrimonio: la Casa Agreda y su posible venta por parte del Ayuntamiento. Probablemente, el peor veredicto que podría dejar el director general sería la decisión de incluir el barrio en la lista de Patrimonio Mundial en Peligro, pero Carrascosa lo ve como una posibilidad más que remota e indica que hay muy pocos casos en el mundo.

De cualquier modo, el representante de la institución en Granada, lamentó cierta carencia de concienciación. "La inclusión en la lista del Patrimonio Mundial no cala en nosotros como en otros lugares. Nuestra tierra es bastante lenta para movilizarse por el patrimonio y no existe una verdadera conciencia de la responsabilidad de todos, desde los vecinos hasta el Estado", reprochó Carrascosa, que por otro lado, descartó que se haya planteado oficialmente la posible inclusión del centro histórico de Granada en la lista, al menos por el momento.