Los comerciantes granadinos esperaban como agua de mayo la campaña de Navidad para salvar una temporada de invierno catastrófica y ahora aguardan al comienzo de las rebajas para empezar 2012 con buen pie. Y, para variar, lo hacen con optimismo. La Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía (CECA) publicó ayer sus previsiones para las rebajas que comienzan el próximo sábado, que apuntan a un "espectacular" inicio de la campaña. Los descuentos agresivos a los que los consumidores ya se han acostumbrado volverán desde el primer día, lo que asegura la afluencia a las principales zonas comerciales de la provincia.

En Granada, el sector espera facturar alrededor de 28,5 millones de euros, algo menos que lo previsto en las anteriores rebajas de invierno (entonces la CECA aspiraba a que la provincia alcanzara un volumen de negocio de 31 millones de euros), pero más que lo que finalmente consiguieron vender los comercios granadinos. En el conjunto regional se prevé una facturación aproximada de 270 millones de euros, que, de conseguirse, supondría un incremento del 5% respecto al pasado año.

La CECA tiene claro a qué se debe el aumento de las ventas: "a los importantes descuentos que los comerciantes van a aplicar -a costa de la reducción de sus propios márgenes de comerciales- para reactivar el consumo", así como a una Navidad deslucida. Porque, según la patronal, el periodo festivo no ha sido todo lo bueno que debería. "Estamos muy esperanzados con estas rebajas, ya que prevemos que los primeros días van a ser muy notables en ventas. La campaña de Navidad no ha cubierto las expectativas de ventas, ya que la demanda por parte de los consumidores ha sido muy débil. De ahí que tengamos depositada nuestra esperanza en este nuevo periodo de ventas, que va a caracterizarse por los grandes descuentos que se van a aplicar desde un principio", aseguró el presidente de CECA, Manuel García-Izquierdo.

Como viene siendo habitual desde que comenzó la crisis, el comercio tradicional granadino iniciará la campaña de rebajas aplicando descuentos generalizados del 50%, que alcanzarán el 70% a medida que avancen los días. Sólo de esta manera el sector tradicional puede hacer frente a las franquicias, las multinacionales y las grandes superficies comerciales, que han adoptado la práctica habitual de dar el pistoletazo de salida a la campaña de descuentos mucho antes de que llegue el día 7 de enero. "Con este modo de proceder, cada vez más generalizado, estos establecimientos incurren en una competencia desleal, ya que desvirtúan el periodo convencional y legal de las rebajas, restando atractivo a la propia campaña", se quejó el presidente de la patronal.