La construcción ha vuelto este lunes tras dos semanas con el cemento sin dar vueltas y 21.600 trabajadores del sector en la provincia pendientes de los nuevos movimientos del Gobierno ante la crisis sanitaria del coronavirus. Eso sí, ha vuelto con la restricción de obras y reformas en casas y edificios donde hay personas viviendo. Un nuevo parón que afectará a centenares de autónomos en Granada, dentro de un sector que ha retomado el 75% de su actividad anterior según las estimaciones de la Asociación de Constructores y Promotores de Granada (ACP).

Aunque claro, como resalta el secretario general de la ACP Granada, Francisco Martínez-Cañavate, los rendimientos obviamente son "menores" y condicionados como el resto del tejido productivo por la situación económica que ha generado el Covid-19. 

"Hemos pasado de un estado de pánico a un estado de preocupación" apunta el secretario genera de la ACP, para quien además del problema de la improvisación y la falta de negociación del Ejecutivo con los empresarios se sigue añadiendo el problema de la inseguridad en el puesto de trabajo.

Así, respecto a la demanda de equipos de proteción EPIs en la obra, desde la patronal aseguran que sí se ha dotado de mascarillas a los empleados para reiniciar los trabajos. No obstante, advierte de que son protecciones que a fin de cuentas sirven como mucho para dos jornadas por lo que reitera la necesidad de reponer mascarillas en las obras.

"Hacemos un llamamiento a las instituciones competentes para reponer mascarillas para la semana que viene en un sector que tiene a 21.000 personas expuestas al riesgo", asegura Martínez-Cañavate recordando además que la mascarilla es una protección que, pese a todo, no es obligatoria.

En cualquier caso, los empresarios aseguran que se está cumpliendo con las medidas de seguridad acordadas tales como desinfectar herramientas que utilizan varios trabajadores, promover el distanciamiento entre los empleados en la obra, evitar los corrillos y en caso de acercamiento promover la utilización de mascarillas y otras medidas de seguridad. Igualmente, se ha recomendado tomar la temperatura a los trabajadores con termómetros.

Respecto a la recuperación de días, los constructores esperan que no haya problemas para sentarse con los sindicatos y negociar que los trabajadores retomen esos ocho días de parón en los más de siete meses que quedan para finalizar el año. "El sector lo puede encajar", asegura el secretario general de la ACP Granada.