Once días. Es el tiempo que ha pasado desde que se registró el positivo por coronavirus de una funcionaria del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Granada, situado en la sede judicial de Caleta. Sin embargo, desde entonces ninguno de los compañeros ha sido sometido a una PCR o puesto en cuarentena, pese a haber trabajado en el mismo entorno que la afectada. Por este motivo, desde el Sindicato Profesional de Justicia de la USO (SPJ-USO) han denunciado que se ha hecho "caso omiso" a una situación que consideran "intolerable".

"Solicitamos al Comité Permanente de Seguridad y Salud Laboral de la Administración de Justicia de Granada que se pusieran en cuarentena a todos los trabajadores y demás personas que hubieran estado en contacto estrecho con la funcionaria, así como que se les practicara, de forma urgente, prueba PCR que confirmara o descartara más contagios", indicaron desde el SPJ-USO, que además presentó un escrito ante la Delegación de Salud "rogando que se tomen medidas".

Pese a ello, " los trabajadores de dicho Juzgado siguen en sus puestos –no han estado en cuarentena ni un solo día–, y lo único que se les ha practicado es una prueba test, que está demostrando un alto índice de error, toda vez que se ha practicado a todos los funcionarios de justicia de Andalucía, siendo muchísimos los falsos positivos dados, por lo que los negativos también pueden ser erróneos", denunciaron desde el sindicato, un hecho que consideraron "intolerable".