La Fiscalía de Granada ha concluido que Óscar C.T. asestó 18 cuchilladas a la que había sido su pareja, una joven de 29 años llamada Ángela María, antes de profanar su cadáver introduciéndole objetos en sus partes íntimas. Por ello, solicita que sea condenado a 25 años como presunto autor de un delito de asesinato, y a otros cinco meses más por la presunta profanación del cuerpo.

Granada Hoy ha tenido acceso al escrito de conclusiones provisionales emitido por la Sección de Violencia sobre la Mujer de la Fiscalía Provincial de Granada, en el que solicita la apertura de juicio oral contra el joven, que trató de suicidarse sin éxito tras el crimen, arrojándose desde el Peñón de San Cristóbal de Almuñécar, y que permanece en situación de prisión provisional.

El terrible suceso ocurrió el 9 de julio del año pasado, en un piso del número 9 de la calle Escritor Miguel Toro de la capital, donde la pareja había convivido hasta que Ángela María decidió dejar al acusado e irse a vivir con un amigo.

Además de la pena privativa de libertad, el Ministerio Público reclama que Óscar C.T. indemnice a los padres de la fallecida con un total de 100.000 euros (50.000 a cada uno). En cuanto a las posibles circunstancias que modificarían la posible responsabilidad criminal del acusado, la acusación pública solo aprecia la agravante de parentesco, en tanto que ambos "habían mantenido una relación de afectividad análoga a la conyugal".

Según relata la Fiscalía en su calificación, el idilio amoroso entre el procesado y Ángela María C.R. se inició a principios de 2012. La pareja convivió en el inmueble que luego se convertiría en escenario del crimen hasta primeros de julio, fechas en las que Ángela decidió "romper la relación sentimental con Óscar".

El día del crimen, la pareja había quedado en el piso para recoger sus pertenencias, limpiarlo entre los dos y entregarlo al dueño. La chica llegó sobre las 12:00 horas. La limpieza empezó por la cocina.

Mientras ambos limpiaban -prosigue el escrito de la Fiscalía-, Óscar le reprochó su nueva relación, "y tras este reproche, el acusado decidió acabar con la vida de Ángela". Así, entre las 13:00 y las 14:00 horas, "aprovechando el acusado que Ángela se encontraba dándole la espalda y limpiando los platos en el fregadero de la cocina, cogió un cordón grueso, de los que se utilizan como juguete de perro y, de forma inopinada y sorpresiva, le rodeó el cuello".

El procesado usó dicho objeto para realizar una "presión de inmovilización". Acto seguido, "para culminar su propósito de matarla", cogió con su mano derecha un cuchillo de cocina, de 13 centímetros de hoja, que clavó a la víctima.

La Fiscalía detalla en su calificación cómo fue el ataque: Óscar se encontraba detrás de ella y, "agarrándola para que no se moviera, alargó el brazo y comenzó a acuchillarla para acabar con su vida, propinándole un total de 18 cuchilladas".

Ocho de las puñaladas fueron en el tórax y tres de ellas fueron "de carácter mortal". Tras la última cuchillada, "dejó clavado" el cuchillo, sin extraerlo. Las otras diez heridas que Ángela presentaba estaban en sus brazos y en la mano. El informe forense determinó que la joven murió por un shock hipovolémico, causado por las heridas de arma blanca del pecho.

A juicio de la acusación pública, "por lo prolongado de su acción y el número de cuchilladas asestadas", el procesado trató de aumentar de forma deliberada e inhumana el dolor y sufrimiento de la que había sido su pareja.

El cuerpo de la joven quedó tendido en el suelo de la cocina con el cuchillo y el acusado, "con notable desprecio hacia el cadáver de la que fue su compañera sentimental", le introdujo objetos en sus partes íntimas, entre ellos un consolador y una botella.

La causa judicial se encuentra a las puertas de juicio, en la fase en la que las partes califican los hechos. Las fuentes judiciales consultadas por este diario precisaron que aún no se ha fijado fecha para el enjuiciamiento, pues ahora toca a la defensa emitir su escrito. El caso, que ha sido instruido por el Juzgado de Violencia sobre la mujer número 1 de la capital, será enjuiciado por un jurado popular en la Audiencia de Granada.