Trescientos niños de la zona norte de Granada participarán durante los meses de julio y agosto en la escuela de verano municipal María Zambrano. Este programa de colegios, que está presente en toda la ciudad, tiene una especial importancia en este sector de la población, debido a la conflictividad de la zona.

El alcalde de Granada, José Torres Hurtado y el delegado del Gobierno andaluz, Jesús Huertas, inauguraron ayer el programa estival; un acto al que acudieron también la delegada de Igualdad y Bienestar Social, Magdalena Sánchez y la de Educación, Ana Gámez.

Se trata de la única escuela en la que la Junta de Andalucía participa activamente, con una inversión de más de 40.000 euros. Según explicó Jesús Huertas, la colaboración en este proyecto es "muy importante para prevenir la desprotección de los menores".El objetivo principal en este caso es evitar la "deambulación callejera" de los pequeños y los riesgos que ello conlleva, explicó esta mañana en durante la visita el delegado del Gobierno.

Al mismo tiempo y al igual que con el resto de colegios con actividad en el verano, éste pretende ayudar a los padres a conciliar la vida familiar y laboral y mantener la actividad educativa y socializadora durante los meses de vacaciones. Las actividades realizadas en la escuela tendrán un carácter más lúdico que durante el curso ordinario, ya que aunque los pequeños acudan a clase, se trata del periodo vacacional. La música, las actividades deportivas y los idiomas estarán muy presentes.

Por otra parte, y en la línea de evitar la exclusión social, se llevan a cabo iniciativas de interacción entre estos niños y los de otras zonas de la ciudad.

Además de la inversión de Junta y Ayuntamiento, las asociaciones del distrito han tenido una importante participación para que este proyecto se lleve a cabo.