En Módena, en el punto cero de Emilia Romaña, está el granadino Pepe Mendoza, un profesor de pádel que alerta a través de sus redes sociales de la importancia de quedarse en casa y de que España entienda la importancia de lo que pasa en el mundo. "Veo por aquí a mucha gente politizado el problema, intentando buscar culpables", asegura Mendoza, para el que este momento más que de culpables es de "buscar soluciones". El especialista de la raqueta apela a la responsabilidad con las medidas adoptadas y al civismo.

"Esto es un problema global, todos nuestros gobernantes, sean de Italia, España, Alemania... Están intentando solucionar este problema rodeados de los mejores expertos en las áreas relacionadas con esta crisis. Es fácil criticar a unos y otros. Pero creo que debemos ser más humildes y no pensar que somos más listos que estos expertos. Os deseo mucho ánimo a todos, mucha paciencia y mucho respeto por las medidas", asegura Mendoza, a punto de cumplir las dos semanas confinado en su casa de Italia, un país que, según él, "está demostrando ser un ejemplo de todo esto porque los italianos están cumpliendo la regla del metro de distancia a raja tabla, también la de la limitación de la circulación".

En Bolonia está Jaime Santana, un granadino de 21 años, de Albolote para ser más exactos. Un estudiante de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte en la Universidad de Almería con una beca erasmus. "Llevo en Bolonia desde principios de septiembre, pero hasta hace dos semanas no era consciente de la gravedad de la situación" asegura este joven que se encontraba de viaje cuando se enteró por las noticias de las medidas para confinar a las personas en sus casas que empezaron en Milán y Turín y acabaron trasladándose al resto del país.

"Italia está siendo muy tajante con las restricciones que está tomando y es totalmente consciente de la facilidad con la que el coronavirus es capaz de expandirse", indica Santana, que celebra la conciencia de la gente en los supermercados, en la farmacia e, incluso, por la calle toman la distancia de seguridad. El estudiante granadino también elogia que el Gobierno italiano no para de sacar nuevos decretos con nuevas medidas de prevención y no deja de alertar y aconsejar a la población para que se queden en sus casas.

El alumno de Ciencias del Deporte tiene buena comunicación con su universidad, agradece el enorme apoyo de su familia, "que me apoyan en todas las decisiones que tomo" y manda un mensaje de aliento: "Al principio es un caos, los primeros días son horribles y piensas que se va a acabar el mundo, pero después de unos días la situación se va adaptando y empiezas a concienciarte de que tú vida ha cambiado pero que gracias al trabajo sin descanso de muchos trabajadores (médicos, enfermeros, analistas, dependientes, etc), la situación va a ir a mejor", afirma.