Justo Márquez, el granadino que reclama el uso del agua de un estanque familiar, protestará encadenado y en huelga de hambre ante los juzgados de Almuñécar (Granada), después de anular la marcha a pie que intentó llevar hasta Madrid cargado con una cruz cuando se encontraba en la provincia de Jaén.

Según ha explicado Márquez, se trata del "último cartucho" que tiene para conseguir que la Justicia interceda para que el cuñado de su mujer, enfermo e impedido, pueda usar el agua de un estanque que comparte con otros familiares. A partir de la próxima semana, Márquez se encadenará a una palmera que hay frente a los juzgados durante "día y noche", sin zafarse de las cadenas "absolutamente para nada".

Ha señalado que tuvo que volverse de su peregrinaje porque un familiar había vertido falsas acusaciones sobre él, ya que decía que tenía amenazado a sus vecinos, por lo que bajó de nuevo hasta Motril para ponerle una denuncia y ya no le daba tiempo a llegar a Madrid antes de comenzar a trabajar el 1 de septiembre. Antes de esta protesta que tiene prevista y de la fallida marcha a Madrid a pie y con una cruz a cuestas, Márquez ya protestó con esa misma cruz y en huelga de hambre ante los juzgados en junio, sin obtener ningún resultado.

Según ha manifestado, el objetivo de esta protesta es reivindicar los derechos de su cuñado, que es discapacitado y vive con él y necesita el agua del estanque, ubicado en la propiedad de un familiar suyo, quien ha tapiado el acceso a la finca impidiendo que se pueda coger agua del mismo. Al parecer, desde que falleció su suegro, la finca quedó dividida en varias partes, y el agua fue utilizada por las tres partes en las que se repartió, pero desde hace varios meses un familiar que vive en Barcelona decidió impedir el acceso a la alberca, con lo que no pueden llegar al agua.