Granada

Los hospitales integran el coronavirus en su rutina: vuelven las pruebas y se reabren los quirófanos tras el pico en Granada

  • Para reorganizar los hospitales se crearán "circuitos limpios y sucios": discriminar plantas y quirófanos dedicados a pacientes Covid-19 dado que hasta normalizar la situación pueden pasar "semanas o meses"

Los hospitales integran el coronavirus en su rutina: vuelven las pruebas y se reabren los quirófanos tras el pico en Granada

Los hospitales integran el coronavirus en su rutina: vuelven las pruebas y se reabren los quirófanos tras el pico en Granada

Los hospitales están comenzando a reintegrar el coronavirus en su rutina alejados ahora de aquellos días negros que invitaban solamente a los malos presagios. Con cifras positivas concatenadas aunque sin certezas absolutas para descartar una 'recaída' en la epidemia, la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía entiende que el pico de contagios y hospitalizaciones ha pasado por lo que ya ha comunicado a sus trabajadores su plan sanitario de vuelta a la normalidad. Los aspectos más relevantes conciernen a las pruebas diagnósticas y al calendario quirúrgico, los grandes gólems de la sanidad pública y que quedaron pausados durante los peores momentos de la crisis del coronavirus y que ahora se retoman poco a poco. 

Según la comunicación a la que ha tenido acceso Granada Hoy, este "plan funcional de desescalada" ya está preparado "ante el descenso del número de casos por CoV-19" por lo que se debe dibujar en el "ámbito hospitalario un plan de actuación que nos permita ir retomando el aumento de la actividad asistencial en la medida en que las áreas ocupadas por casos covid-19 se vayan liberando", reza el documento firmado por Diego Agustín Vargas Ortega, director general de Asistencia Sanitaria del SAS. 

Hospitalización

Se trata de un plan que aborda todos los ámbitos de la atención hospitalaria y que comienza con la hospitalización, el plano más dañado de la sanidad por la congestión asistencial provocada por el desborde de casos graves que ha llegado a sufrir la provincia. En este punto contemplan que el momento en el que "vayan disminuyendo el número de pacientes ingresados y en aislamiento por COVID-19" se irán reordenando paulatinamente los servicios y "recuperando la normalidad de las distintas plantas y alas hospitalarias en función del número de pacientes y de profesionales en activo". 

Se tendrá en cuenta el disponer de habitaciones para el caso de que ingrese algún paciente confirmado o sospecha de Covid-19, sostiene el plan, para prevenir que no vuelvan a producirse focos de contagio de esta enfermedad que ha demostrado ser altamente expansiva. Para la realización de pruebas diagnósticas o terapéuticas los hospitales comenzarán por aquellos procedimientos preferentes para luego ir "extendiendo actividad al resto de los pacientes cuidando los circuitos de desplazamiento y de movilidad intrahospitalario y el uso de equipos de protección individual en caso de que fuera necesario".

En este punto también se propiciarán "altas tempranas de los pacientes hospitalizados cuya patología lo permita, así como ajustar al máximo la estancia media" para aliviar la carga de hospitalizaciones.

Sobre las restricciones de contacto con familiares, se continuará en un primer momento con la restricción de visitas a un único familiar y progresivamente, conforme disminuya el número de casos, se podrá ampliar a dos familiares por paciente- Esto se hará "individualizando cada caso para evitar el trasiego de pacientes y familiares por los pasillos".  

Reordenación de UCI y Reanimación

La crisis del Covid-19 ha obligado a cambiar todo el sistema de camas de UCIs ante el aluvión de pacientes graves que requerían respiradores. Con esta hipotética vuelta a la normalidad que está por llegar, este plan contempla "reordenar e ir liberando las unidades de URPA, reanimación y quirófanos que se han habilitado para la atención a pacientes Covid-19". De este modo se podrá ir recuperando la actividad al completo en función de disponibilidad estructural y de profesionales. 

Por otro lado, el SAS se cuida en salud y prevé "disponer de la capacidad, incluida la dotación de personal, para ampliar el número de pacientes tratados en UCI en caso de ser necesario".

Dentro de las medidas se incluyen decisiones que afectan a los familiares y que retoma el carácter humano de la atención, que por desgracia a consecuencia de la virulencia de la crisis tuvieron que dejarse de lado. Por ello, se plantea "establecer medidas de acompañamiento de los pacientes en situaciones de mal pronóstico inmediato" así como señala que "evitar la soledad de los pacientes debe ser un objetivo prioritario dentro de las estrategias de humanización de cada centro". En estas situaciones "se analizará la situación del acompañante en relación con Covid-19 con la realización de test rápido". 

Consultas con el especialista

Las consultas externas es otro de los grandes buques del sistema sanitario que ahora tiene que volver a la ruta con una lista de espera predeciblemente agigantada por la situación de parón asistencial. A esto se le suma sus demoras acumuladas ya que tanto los especialistas como los quirófanos son los puntos donde históricamente más listas de espera de pacientes se ha amontonado. 

La vuelta a las consultas se hace en este caso con todas las precauciones. El plan contempla que "habrá que tener en cuenta si el paciente se encuentra con síntomas o no o es caso sospechoso para permitir la asistencia presencial o continuar con la asistencia telemática y tomar las medidas oportunas".

En las primeras visitas al especialista se mantienen las primeras las citas preferentes y de procesos oncológicos para más tarde ir incorporando citaciones de Pediatría de Atención Primaria con atención presencial comenzando por aquellas patologías que se "consideren imprescindibles priorizando el criterio clínico como las de hematología, neurología, cardiología, hemodinámica y digestivo".

Posteriormente, sostiene la comunicación, "ir escalando la incorporación de urología, cirugía, nefrología, infeccioso, unidad del dolor, anestesia, dermatología, alergología, salud mental, cribado de cáncer de mama, cribado cánder de Cérvix, cribado CCR, entre otros". 

También se plantea incorporar la actividad de pruebas diagnósticas "a ser posible en acto único en todas las modalidades: Ecografías, Tac, Resonancia Magnética, radiografías, estudios intervencionistas y radiología convencional evitando el número de desplazamiento de los pacientes".

Posteriormente se incorporarán citas para revisiones y recogida de resultados en aquellos procedimientos que no sea posible el acto único o en aquellas que no se puedan realizar vía telemática. A ser posible estas consultas se realizarán vía telemática para evitar los desplazamientos y las aglomeraciones en las salas de espera.

En cuanto a la presencia en las consultas, la citación se realizará dejando tiempo suficiente entre citas para evitar las aglomeraciones en las salas de espera por lo que se deberá realizar la gestión de agendas correspondiente en función de la especialidad y patología. Todo esto, sostienen, teniendo en cuenta el tamaño de la sala de espera para mantener la distancia de seguridad.

Se organizarán así unos días de consulta que definirán para cada área y progresivamente se irá ampliando tanto el número de días de consulta como el número de pacientes y el intervalo horario de mañana y/o tarde. Además, en pro de evitar riesgos sostienen que se aprovechará lo aprendido en la reordenación en esta situación de estado de alarma por lo que aconsejan mantener las consultas y seguimientos de pacientes vía telemática que fuesen posibles.

Reactivación de los quirófanos tras superar el pico 

Los quirófanos volverán a abrir paulatinamente lo que supondrá un esfuerzo extra para los hospitales ya que el centro de su universo durante más de un mes ha sido frenar el coronavirus centrando todos los recursos y la planificación de los mismo en ello. 

El plan sostiene que con la progresiva disminución de la demanda de atención hospitalaria de casos de COVID 19, "hay que reorganizar a los hospitales para vuelta a la atención sanitaria no COVID, que había sido postergada".

Durante la fase aguda del virus muchos planes de contingencia hospitalarios incluían las camas de URPA (reanimación) como ampliación de las UCI, incluso los quirófanos y hospitales de día, así como, las camas de hospitalización para patología quirúrgica utilizadas para ingresos por COVID-19.

Con la casa así de revuelta, "hay que iniciar una desescalada de los niveles de los planes de contingencia acordes a la demanda de cada momento y a las particularidades de cada centro". En este aspecto, cada uno de los centros deberá presentar su plan de reactivación de la actividad quirúrgica.

Para esta reorganización este informe plantea una cuestión interesante: delimitar espacios concretos a los pacientes de Covid-19. "En aquellos centros que sea posible se destinaran edificios específicos para los enfermos de COVID y si no es posible se designarán áreas específicas de atención con circuitos diferenciados del resto de pacientes no COVID", sostiene Salud.

A la hora de reorganizar los hospitales, se considera que hay que crear "circuitos limpios y sucios", esdecir, discriminar plantas y quirófanos dedicados a pacientes Covid-19 y los que no, "tratando de dar una atención mixta ya que hay normalizar el sistema sanitario, pero de forma sostenida, algo que puedetardar semanas o meses".

Ni Fermasa ni Abades como opción a corto plazo

Durante los días de máxima saturación hospitalaria en Granada la Consejería de Salud diseñó una serie de planes de contingencia, tanto en cada centro como de forma conjunta en la provincia que a priori parece que no serán necesario. Esto suponía prever varias soluciones al hipotético colapso en los principales hospitales. Una de ellas es el posible traslado de pacientes entre centros de la provincia que no estén tan saturados. Todo ello después de haber habilitado varias plantas del viejo hospital Clínico de la Avenida de Madrid para los pacientes más leves.  

Pero las dos opciones más importantes que se barajaron y que se han comenzado a preparar son la de medicalizar el Hotel Abades Nevada (cerca del PTS), que cuenta con 500 camas, y la instalación de un hospital de campaña en el recinto de la feria de muestras de Fermasa. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios