El acusado, en prisión provisional, conducía bajo los efectos del alcohol pese a que se dirigía al juicio rápido en el que había sido citado también como procesado porque la Guardia Civil lo sorprendió el día anterior conduciendo embriagado.

"Se da la paradoja de que esa mañana se dirigía al Juzgado de Guardia ya que estaba citado para las 10:00 horas para la celebración de un juicio rápido por alcoholemia, ya que el día anterior conducía por la N-432 y fue parado por la Guardia Civil", ha apuntado al Fiscalía.

En su escrito de acusación, al que ha tenido acceso Efe, la Fiscalía ha calificado los hechos como un delito de homicidio por imprudencia grave, otro de conducción temeraria y por conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas. Ha interesado para el acusado, en prisión provisional por esta causa, una condena a cinco años de cárcel y la pérdida definitiva del permiso de conducir.La víctima tenía 54 años y cuando fue atropellado mortalmente, un domingo por la mañana, se dirigía al gimnasio, estaba casado y tenía dos hijos. La familia, que ejerce la acusación particular representada por el abogado Juan Fernando Hernández, ha elevado la petición de condena a seis años de prisión por homicidio por imprudencia grave, conducción temeraria y conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas.