Un jurado popular declaró ayer no culpable de homicidio a la mujer acusada de matar de una puñalada a su pareja en el transcurso de una discusión en el domicilio conyugal.

El veredicto fue alcanzado por unanimidad de los nueve miembros, que argumentaron que, aunque no ha quedado probado quién de los dos empujó hacia el abdomen de la víctima el cuchillo que la mujer había cogido supuestamente para fregarlo, sí ha quedado acreditado por la prueba pericial que la herida que presentaba "no era de carácter homicida o suicida, sino accidental".

El jurado considera "contrario a la lógica" que él no hubiera reaccionado de forma violenta en ese momento, cuando minutos antes la había "maltratado", y da por probado que la acusada pidió ayuda cuando su pareja resultó herida y que "en ningún momento dejó que se desangrara". En la última sesión del juicio, el fiscal elevó de 8 a 13 años de cárcel su petición de condena para la mujer (la misma que solicitaba la acusación particular) al considerar que antes de pedir auxilio modificó varios objetos de la casa, mientras que la defensa solicitó su libre absolución al sostener que la agresión se la produjo el fallecido de forma accidental. El jurado ve como "elementos de convicción" el que quedara probado que la acusada fue víctima de malos tratos continuados y de intentos de violación por parte de la víctima, con el que llevaba conviviendo siete años cuando ocurrieron los hechos, en 2004. Ese día, su compañero llegó bebido y tras insultarla la golpeó varias veces e intentó violarla hasta que la mujer fue a la cocina, donde, "tratando de aparentar normalidad para calmarlo", se puso a fregar los platos y cogió un cuchillo de cocina para lavarlo, momento en el que el se produjo el incidente.Según el jurado, la acusada trató de presionar la herida mientras pedía ayuda y hasta que se personaron en la casa una vecina y su hermana.