Tribunales

Un mando de la Policía Local de Granada, a juicio por presunta violencia de género

  • El intendente, que durante el verano llegó a ser el jefe sustituto, sostiene que todo es una "persecución" personal, con intereses políticos cruzados

Un mando de la Policía Local de Granada, a juicio por presunta violencia psíquica contra su ex pareja

Un mando de la Policía Local de Granada, a juicio por presunta violencia psíquica contra su ex pareja

El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Granada ha abierto juicio oral contra uno de los actuales mandos de la Policía Local de Granada, J. J. M. J. -que durante el pasado verano ha ejercido la función de jefe del Cuerpo- por delitos de violencia psíquica presuntamente cometidos contra su expareja. El intendente policial se defiende y asegura que este asunto se enmarca dentro de otra serie de denuncias cruzadas relacionadas con las visitas al hijo en común y que se debe a una "persecución" personal, profesional y política.  

J. J. M. J. se enfrenta a una petición del fiscal de 3 años y 10 meses de cárcel e inhabilitación, 4 años de privación del derecho de tener y llevar armas y 6 años de alejamiento de su ex pareja, como presunto autor de los delitos de violencia psíquica habitual y menoscabo psíquico. También pide el representante del ministerio público 9.000 euros de indemnización para la denunciante. 

En su escrito, el Ministerio Público detalla un presunto comportamiento "celoso" del acusado que lo llevaría a "controlar el teléfono móvil" de su pareja, censurarle amistades masculinas, "amedrentar" a sus compañeros de trabajo y dirigirle "frases humillantes". La principal fuente de pruebas estaría en una serie de mensajes de whatsapp enviados al final de su relación y una vez concluida la misma, tras el nacimiento del hijo de ambos, que ahora tiene 4 años. 

Son precisamente las circunstancias relacionadas con el menor las que, según explica el acusado, han provocado esta situación judicial. El intendente de la Policía Local ha explicado a este periódico que, a su juicio, la acusación de su expareja se enmarca en otra serie de denuncias para "evitar que vea al niño", con el que actualmente ha de encontrarse en un punto de encuentro de forma tutelada. J. J. M. J. acusa a su antigua pareja de tratar de perjudicarlo con una denuncia de abuso al menor (sobreseída por un Juzgado de Instrucción de la capital el pasado abril) y seguir los "patrones de conducta de la asociación Infancia Libre". Además, la denunciante ha sido condenada por otro juzgado por desobediencia al entorpecer el régimen de visitas del padre, que no cumplía alegando temor a posibles malos tratos. 

El Juzgado que ha instruido este caso de supuesta violencia psíquica abrió juicio oral contra J.J.M.J. el pasado 29 de junio, según auto al que ha tenido acceso este periódico. Tras la investigación judicial que se llevó a cabo durante 2019, la jueza de Violencia decidió que había indicios de delito para pasar a la siguiente fase procesal en enero de este año, aunque no aceptó la petición de medidas cautelares de la acusación particular, al considerar que ya había transcurrido tiempo desde los últimos mensajes intercambiados y porque el informe de la Unidad de Valoración de Violencia de Género (UVIVG) reconocía un riesgo de violencia "bajo". 

Esto ha permitido a J.J.M.J. mantener su arma y, por tanto, desarrollar su vida y su cargo en la Policía Local al menos hasta la próxima celebración del juicio, que compete a un magistrado de lo Penal de Granada. 

El intendente admite que hubo mensajes "crudos" con la que fue su pareja desde 2010 a 2016, pero que "no hubo insultos ni amenazas", así que confía en su absolución tras el juicio que tendrá que celebrarse. Además de la supuesta "persecución" a la que asegura que está siendo sometido por la madre de su hijo en los últimos años, el acusado sostiene que es víctima también de las luchas internas de la Policía y la batalla política, ya que apunta directamente al PSOE.

  

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