Granada

Siete municipios recurren desde hace dos años a radares de Tráfico para hacer caja

  • Las localidades precisan de la firma de un convenio para el uso de cámaras Multas de hasta 300 euros por superar los límites de velocidad

Hasta siete municipios de la provincia han recurrido en los dos últimos años a radares móviles de la Jefatura Provincial de Tráfico para controlar la velocidad de los vehículos privados en las vías de acceso a sus núcleos urbanos. Es el caso de Baza, Ogíjares, Loja, Cenes de la Vega, Motril, Castell de Ferro y Gójar. Durante este tiempo, a muchos usuarios les habrá extrañado ver en las carreteras coches que sin aparentemente entrañar alerta alguna, se encuentran estacionados en los arcenes o camuflados de alguna forma u otra con el entorno para 'cazar' a quienes incumplen los límites de velocidad establecidos por la señalítica vial ya sea horizontal o vertical.

Para hacer uso de este sistema, según ha podido conocer este periódico, es "indispensable" tener firmado un convenio básico bilateral entre la Jefatura Provincial de Tráfico y el Ayuntamiento en cuestión. Una vez que este trámite se efectúa, en el supuesto de que coincidan en el tiempo varias solicitudes, se tienen en cuenta requisitos tales como el trabajo previo efectuado con dichos equipos por parte del Consistorio correspondiente, el número de habitantes o la relevancia del factor velocidad en la accidentalidad de la población. Pese a ello, hay una máxima establecida: "garantizar la rotación de los equipos". Los criterios mencionados conllevan cierta elasticidad que concluye con unas cesiones "no lineales y no previsibles".

A fecha de 1 de octubre pasado, en 2014 han hecho uso de este sistema las localidades de Loja, Gójar, Ogíjares y Baza. Ante la sorpresa de algunos conductores que pensaban que las competencias de Tráfico se adscribían en solitario a la Guardia Civil, los cuerpos de Policía Local tienen asumida dicha competencia siempre que se circunscriba al núcleo urbano del respectivo término municipal.

La que más uso ha hecho de los también llamados cinemómetros ha sido Baza, por medio de un periodo de cuatro meses. Le sigue Gójar (tres meses y diez días), Ogíjares (tres meses) y Loja (dos meses y medio), según datos remitidos a esta redacción desde Tráfico.

A lo largo de 2013, hasta seis localidades hicieron uso de este método con el auspicio de la Jefatura Provincial de Tráfico. Además de Loja (seis meses y medio) y Baza (dos meses), se sumaron a la lista en el cinturón de la capital Gójar (con casi cuatro meses de vigencia) y Cenes de la Vega (dos meses). En el litoral provincial, Motril (quince días) y Castell de Ferro (dos meses) fueron las únicas que requirieron este servicio.

Un año antes, en 2012, sólo fueron tres los municipios que contaron dentro de su territorio con un coche con cámara detectora. Durante doce meses se cedió a Baza, en Loja estuvo dos meses y medio y en Ogíjares tan solo un mes.

Algunos afectados aseguran que les han llegado multas por valor de 300 euros, cantidad que se reduce a la mitad si se abona en un plazo anticipado. En uno de los casos, el escrito de sanción refleja que en la carretera de acceso a Ogíjares desde la Ronda Sur se debe ir a 50 kilómetros por hora mientras que el conductor alcanzó los 70 kilómetros por hora. Los usuarios de la vía advierten de que en ese punto hasta las líneas de autobús metropolitano superan el registro establecido.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios