Más de 200 niños saharauis pasarán el verano en Granada en virtud del convenio renovado ayer entre la Asociación Granadina de Amigos del Sáhara y el área de Cultura, Juventud y Cooperación Local de la Diputación de Granada, que correrá con los gastos del viaje.

El vicepresidente segundo de la Diputación, Julio Bernardo, y la presidenta de la ONG, Gracia Fernández, firmaron la renovación del acuerdo que recoge una especial "atención al pueblo del Sáhara Occidental porque la situación política en este lugar, lejos de mejorar, parece que da pasos hacia atrás".

Bernardo manifestó su satisfacción por poder colaborar con estos pequeños que pasan en Granada dos meses "lejos del asfixiante calor de su tierra y en mejores condiciones sanitarias", por lo que dio "por muy bien empleado el dinero destinado a este convenio".

Por su parte, Gracia Fernández explicó que casi todos los niños que pasan el verano en Granada se van además con pequeños problemas de salud resueltos, como caries, anemias o deficiencias visuales que se solucionan rápidamente y que, incluso, hacen crecer y engordar a estos pequeños que vuelven a su casa con hasta seis kilogramos más de peso y algunos centímetros de altura.

A su juicio, esta ayuda es muy importante porque sin ella -dijo- "no podríamos sufragar el coste del viaje de más de doscientos niños". Se han elaborado ya algunos estudios que demuestran que los niños que pasan en España sus vacaciones de verano presentan después un desarrollo físico mejor que los que no viajan en vacaciones.