Los presupuestos municipales han despertado una dura reacción por parte de la oposición del Ayuntamiento de Granada no sólo por su recorte inversor, sino también por cuestiones estrictamente formales. El portavoz socialista, Javier Torres Vela, incluso solicitó al gobierno local que los retire y los reelabore de nuevo, porque los actuales son, en su opinión, "un desglose de ingresos y gastos que no son ciertos y sobre los que es imposible realizar un seguimiento". En este sentido recomendó la inclusión de la cuantificación de las partidas, su asignación o la fecha de comienzo.

No se ha tratado de la única anomalía. Así, la portavoz de Izquierda Unida, Lola Ruiz Domenech, que también criticó que los presupuestos no apliquen a cada inversión una cuantía económica, consideró en rueda de prensa "inaceptable" que se presenten los presupuestos sin previamente realizar la liquidación, "máxime en un aspecto tan delicado como es el urbanismo", dijo.

Pero, sobre todo, IU criticó las cuentas de la Gerencia para el próximo año que, con una bajada inversor del 12,3 por ciento, demuestra, en su opinión, la ineficacia del alcalde, José Torres Hurtado, que "durante los últimos cuatro años tiró con pólvora de rey y ahora no le queda dinero para seguir invirtiendo en la ciudad", expuso.

Además criticó que desaparezca de los presupuestos el plan de barriadas preferentes y, sobre todo, que no se incluya una partida específica para poner en marcha un plan integral en el distrito de la Zona Norte, sobre el que se alcanzó un acuerdo refrendado por todos los partidos políticos en el pleno pasado.

Por otra parte, puso en solfa las inversiones previstas en el capítulo de infraestructuras, tales como el cierre del Anillo de la Circunvalación, al calificarlas de "innecesaria y depredadoras para nuestra ciudad".