El envejecimiento de la población y la Ley de Dependencia están reflotando un servicio que hasta ahora tenía sus limitaciones por los prejuicios de la sociedad: las residencias de mayores. Cada vez son más demandadas y se consideran como un servicio necesario de atención a los mayores, lejos de la antigua idea de abandono o desinterés del familiar. Todo lo contrario, están pasando a ser un recurso de ayuda a la familia en la atención al mayor y al dependiente con totales garantías de apoyo y asistencia especializada.

En la provincia de Granada, la delegación de Igualdad tiene 1.669 plazas públicas -entre concertadas y propias- en residencias para mayores. Recurso que se va ampliando cada pocos meses por el aumento de la demanda. Tanto es así que el 90% de estas plazas públicas están ya ocupadas, de forma que sólo quedan vacantes para su utilización inmediata poco más de 150 plazas, todas en zonas rurales de la provincia. Porque la capital y el Área Metropolitana están al cien por cien.

Aunque van creándose colchones con la firma de nuevos conciertos. El pasado 21 de julio se sumaron 55 plazas más.

Esta situación genera dos opciones para los mayores que por la Ley de Dependencia pueden solicitar plaza pública en una residencia. Según la opción que elijan, tendrá que esperar de tres a seis meses o más para tener plaza o bien obtenerla en dos o tres días. Así, si el mayor o la familia aceptan una plaza en cualquier residencia de la provincia (la ley se compromete a buscar un recurso en la misma provincia en el caso de mayores y en toda Andalucía si se trata de discapacitados al ser estos recursos regionales), la Junta le gestiona una en menos de una semana ya que hay zonas con plazas libres, generalmente rurales de la zona Norte de la provincia. Por el contrario, si no quiere abandonar su municipio o la capital dependerá de la disponibilidad de plazas que en ese momento haya en las residencias concertadas o públicas de la zona, lo que puede prolongar la espera varios meses.

"Realmente, lista de espera como tal no hay ya que la Ley de Dependencia garantiza el acceso a una residencia. Lo que hay es zonas con más demanda en las que si el usuario no quiere abandonarlas tiene que esperar unos tres mese, como la capital o Motril, por ejemplo", explicó la delegada de Igualdad, Magdalena Sánchez. "En el caso de la capital, donde están todas ocupadas, se intenta que haya en pueblos cercanos para dar ese recurso".

Las plazas vacantes concertadas se encuentran en zonas rurales como Huéscar, Órgiva o Campotéjar, entre otros.

Cuando entró en vigor la Ley de Dependencia, las listas de espera que había antes por los sistemas comunitarios según los puntos de gravedad se fueron eliminando. "A todas las personas que estaban en lista de espera se les envió una solicitud para que tramitaran la valoración por la Ley de Dependencia, en la que ya se decía el recurso al que tenía derecho y se concede", indicó Sánchez, que reconoció que zonas como la capital y todo el Área Metropolitana tienen aún más demanda que oferta. "El resto de la provincia está bien cubierto", apostilló.

El número de residencias y plazas va aumentando en función del avance de la aplicación de la Ley de Dependencia. "Según el grado y el nivel tiene que haber residencias para dar respuesta a los mayores y a las familias. Luego, según lo que diga el Plan Individual de Atención (PIA) se concederá una plaza en residencia, en centro de día, ayuda domiciliaria o prestación económica, que es lo que se escoge mayoritariamente".

"Nuestro reto es seguir creando plazas en Granada capital y el Área Metropolitana. En Ogíjares tenemos un proyecto, en Armilla también habrá otra nueva y en la capital estamos trabajando en el pliego de condiciones de una nueva residencia en la zona del Zaidín Vergeles", informó la delegada provincial.

Su departamento ha invertido en centros de día y la reforma de residencias casi ocho millones de euros en la provincia.

Igualdad firmó el pasado mes un concierto con cinco entidades de la provincia para sumar 55 plazas a la oferta de la Junta. A final de año serán más de 350 las plazas que se concierten. En 2010, serán 652 plazas más.