Los comerciantes comienzan hoy la temporada de rebajas de verano más desconcertante de los últimos años. La crisis económica está haciendo que los consumidores se retraigan en su afán consumista, parón que afecta a toda la cadena de ventas.

De esta forma, la temporada de rebajas se prevé poco halagüeña. Más, tras dos meses con una caída importante de las ventas. Según el presidente de la Federación Granadina de Comercio, Enrique Oviedo, pese a que la previsión de descenso era del 20%, "en realidad ha sido mayor y han bajado hasta un 30 y 40% las ventas en mayo y junio". Todo, por la situación "económica difícil que atravesamos, que hace que la gente tenga miedo y, por ejemplo, aguante con la ropa más tiempo". De hecho, el textil y el calzado han sido los que más han notado la retracción de las compras esta primavera.

Esta bajada de ventas tan significativa desde hace dos meses hará que haya más producto disponible para las rebajas. Pero no basta con que haya más material para comprar sino que los comerciantes van a comenzar la campaña estival de rebajas con descuentos propios del mes de agosto, del último tramo de las ofertas. "Tendremos que empezar con descuentos del 30, 40 y 50% los primeros días", matiza Oviedo.

La situación de este año no hace más que agravar la mala evolución de los últimos años. "Otras veces ha sido la meteorología la culpable de malas temporadas de ventas pero este año se suma todo". El tiempo, la crisis y hasta las fiestas. Así, por ejemplo, que el Corpus haya caído tan temprano, también ha influido en las ventas de ropa para la feria.

Ante todo esto, los comerciantes están "desconcertados". "Ya lo advertimos desde octubre del año pasado que esto iba a ocurrir, por lo que necesitamos ayudas incluso del Gobierno".

Porque ni medidas como la devolución de los 400 euros de Hacienda esperanza a los comerciantes ya que ellos tienen también ahora una pérdida económica al dar esta ayuda a sus trabajadores. "Además, las hipotecas no hacen más que subir y los alquileres, por lo que el pequeño y mediano comercio no puede subsistir", asegura el presidente de los comerciantes de la provincia. Luego, si se "malvenden" productos demasiado baratos, el comerciante tendrá después en la nueva temporada dificultades para comprar los nuevos productos, seguramente más caros.

Aunque esta crisis no afecta tanto a los grandes comercios, "porque tienen solvencia económica", como a los pequeños, incluso en peligro de supervivencia. Para afrontar esta situación, la Federación espera que la Junta cierre en las próximas semanas un plan de choque para mejorar la competitividad del pequeño y mediano comercio.

Con todo, Oviedo asegura que el sector soportará la crisis. "Es una situación muy delicada pero pondremos nuestra experiencia e inteligencia para salir de ella", dice. Además, anima a los granadinos a que acudan a las rebajas, pese a todo imposibles de predecir. "Igual nos sorprende y la gente acude a comprar". No obstante, no se espera alcanzar la facturación del año pasado, que rozó los 70 millones de euros.