-Se está cuestionando la sostenibilidad y el futuro de la Universidad pública...

-Hay unas medidas adoptadas por el Gobierno que están haciendo que la Universidad pública se encuentre en una situación mala porque se está hipotecando su desarrollo futuro al no poder estabilizar al personal bien formado, porque no se puede contratar. Cuando dicen que no somos sostenibles, yo digo que vamos a verlo con calma. No nos deben tratar a todos por igual. Creo que no se está valorando el papel que las universidades grandes estamos llevando a cabo en momentos tan críticos. Las universidades tenemos que diferenciarnos. Tenemos que hacer, con nuestra autonomía, una defensa importante de nuestra financiación y ahí también pido a la Junta que la deuda sea abonada.

-En esa especialización ¿a dónde tiene que ir la UGR?

-Ésta es una Universidad generalista. Caben todos los modelos porque es grande, con cinco siglos. Tenemos fortalezas y debilidades en las que hay que hacer una discriminación positiva. Debemos tratar que todas las áreas puedan tener una proyección en investigación, en formación.

-Lleva mucho tiempo preparando su candidatura, pero ha guardado la concreción de su programa para el último momento, ¿cuáles serán las medidas estrella?

-Yo tenía especial interés en oír a toda la comunidad universitaria. Creo que hay que hacer un estudio del modelo de 4+1 y 3+2. Un estudio académico y otro económico en paralelo. Voy a reclamar que el coste del grado sea el mismo que el del posgrado, que no haya un encarecimiento ni una mercantilización. Voy a apostar por la estabilización del profesorado, por una denuncia del convenio para incluir a todas las figuras contractuales que se encuentran fuera. Voy a apostar porque no haya nadie a más de 24 créditos. Voy a hacer una tarea institucional muy importante para que se eliminen los decretos y que se reconozca el modelo de financiación por resultados, no por estructuras, voy a apostar por una universidad inclusiva. En el modelo de gestión defiendo una descentralización responsable, no 22 políticas diferentes de cada centro. Política de la UGR es una. Abogo por grandes proyectos de investigación. Voy a crear una oficina de proyectos porque creo que estamos perdiendo oportunidades de financiación.

-Leo en su Twitter: "Quiero una universidad de personas, no de ladrillos". ¿Se ha crecido demasiado?

-Creo que se ha crecido lo que era necesario pero ya no más. Ahora hay que reorganizar los espacios, porque han quedado infraestructuras libres.

-¿Es la burocracia uno de los grandes males?

-Si, creo que es uno de los grandes males junto con la frustración de no poder contratar personal y no poder promocionar.

-¿En estos años de crisis se podría haber hecho más en el tema de personal?

-Creo que los rectores han debido hablar un poco más alto y los órganos de gobierno no han estado en esa búsqueda.

-¿Cómo se paga todo lo que propone?

-Reclamando la financiación a la Junta y en lo que en otra época ha sido la apuesta por el crecimiento en edificios, que era necesario, ahora creo que debemos llevar esa disponibilidad presupuestaria a este tipo de acciones.

-¿Su vitola de favorita es una ventaja o un inconveniente?

-En absoluto me doy por ganadora. Tengo un proyecto de futuro. Yo no miro atrás ni hago críticas a nada ni nadie. Creo que el otro candidato saca cosas del pasado pero yo siempre miro al frente.

-¿Le molesta que digan que es la candidata de izquierdas?

-Me molesta porque yo realmente soy una mujer progresista pero soy la candidata de un colectivo grande de personas y yo no les pregunto qué ideología tienen y a quién votan.

-Si es rectora, a parte del hecho de ser mujer y ya con eso haría historia, ¿cómo le gustaría que se recordara su mandato?

-Quiero que me recuerden como la rectora que logró que el estudiantado fuera copartícipe en primera línea y de forma activa en la construcción de la UGR del futuro.

-La UGR lleva algunos años poniendo el foco en la internacionalización. ¿Qué hay que hacer ahora diferente?

-Tenemos que trabajar en la internacionalización de la investigación y creo que nos queda hacer una política lingüística. Voy a defender que el examen y la acreditación del B1 la asuma la Universidad, que no tenga coste. Y ayuda en la formación lingüística.

-Parecen pocas las diferencias sustanciales entre las propuestas de los dos candidatos. ¿Es algo más personal?

-Sí, creo que tenemos trayectorias diferentes, con tipos distintos de gestión. Yo abogo por una coordinación, que la política de la UGR sea una, coordinada con los centros; abogo por la profesionalización del personal de administración y servicios, por una dignificación de la docencia y en los temas de investigación, hacer incluso discriminación positiva con algunas áreas de conocimiento. Una oficina de proyectos y una apuesta por la transferencia. Y por programas de integración universidad-sociedad, donde he tenido experiencia. Son las cosas que marcan la diferencia.