Este mes de julio logró mantener la tendencia a la reducción en el paro que prácticamente se ha mantenido a lo largo de los cuatro meses anteriores pero no pasará a la historia por la contundencia de los datos. El paro cayó el mes pasado en 394 personas, según la información publicada ayer por el Servicios Público de Empleo (Sepe), lo que supone una variación intermensual del 0,47%, la más baja para este mes desde 2014, cuando el paro en un mes que tradicionalmente 'tira' del empleo gracias a las contrataciones de verano se redujo en un tímido 0,21%. Para encontrar otro dato similar -por lo modesto de la bajada del paro- hay que remontarse a 2011, cuando la caída del desempleo en la provincia fue del 0,22%.

Las contrataciones extra de restauración y negocios en julio no han sido suficientes para mantener el ritmo de los últimos meses. Sin ir más lejos, el paro en junio -comienzo de verano y mes clave en las contrataciones necesarias para afrontar la temporada estival- descendió con respecto a mayo en 1.507 personas gracias al sector servicios.

Con todo, la evolución que marca el discreto -0,47% de julio mantiene un ritmo claro de bajada del paro, que se acerca, por fin, a la barrera de los 80.000 desempleados, todo un éxito para una provincia que hace apenas dos años, por estas mismas fechas, contabilizaba más de 100.000 personas en la cola de las oficinas de empleo. El dato conocido ayer es, de hecho, el mejor desde septiembre de 2009, cuando en la provincia se contabilizaban 81.742 parados.

El balance, positivo pese a lo discreto, se debe como es tradicional al sector servicios, que sin embargo muestra en julio síntomas de ralentización. De nuevo los servicios acapararon el mayor número de contrataciones (el 60% de los que salieron del paro lo hicieron por gracias a ese sector), pero fueron apenas 232. En junio, el sector vinculado a las contrataciones turísticas y al comercio -con parte de los negocios ya en plena campaña de rebajas- permitió salir del paro a 1.286 personas, mientras que en mayo fueron 975 personas. En abril se contabilizaron 1.541, y en marzo, 1.110. Enero y febrero fueron harina de otro costal con datos negativos en el empleo, aunque incluso en febrero hubo 309 desempleados menos en servicios. Ese mes fue la agricultura la que arrastró el balance intermensual a datos negativos.

El pasado julio, la agricultura también colaboró a mejorar los resultados de julio, con 131 desempleados menos (el total es de 7.718), mientras que la industria y la construcción también tuvieron un comportamiento positivo, con 105 y 93 personas que salieron de las listas del SAE, respectivamente. Sí repuntó el colectivo sin empleo anterior (167) hasta alcanzar un total de 8.903. Es el único que en julio ha engrosado el número de personas que buscan trabajo.

En cuanto al número de contratos registrados, cayeron un 10,15% con respecto al mes anterior hasta los 40.854. En este número la clave es la temporalidad. Sólo 1.575 fueron fijos, mientras que el resto venían con fecha de caducidad. Pese a la caída de la contratación, ha subido muy levemente el número de afiliaciones a la Seguridad Social en la provincia, que ha crecido un 0,09% con respecto al mes anterior. Según los datos facilitados por el Ministerio de Empleo, ha habido 292 cotizantes más en Granada hasta alcanzarse los 319.348 afiliados a la Seguridad Social. Granada es de las pocas provincias andaluzas con dato en positivo, junto a Cádiz (2,72%) y Málaga (1,30%). De hecho, el dato regional indica que ha caído el número de afiliados un 0,37% en toda la comunidad. El balance interanual indica datos más positivos en cuanto a la Seguridad Social en Granada, que ha ganado en los últimos doce meses 12.311 afiliados (4,01%).

Desde la perspectiva de los empresarios, el presidente de la Confederación de Empresarios de Granada, Gerardo Cuerva, se mostró satisfecho por la bajada del paro, aunque admitió que la caída experimentada "está lejos de la cifra registrada en los dos años anteriores". Cuerva advirtió de que esta tendencia positiva "podría ser mucho más notable si la costa granadina estuviera más desarrollada turísticamente".

Por su parte, para el secretario general de UGT Granada, Juan Francisco Martín, la bajada del paro esconde "datos muy preocupantes sobre la situación sociolaboral del mercado de trabajo granadino" y advirtió que "la precariedad laboral se está haciendo crónica y estructural". En la misma línea valoró los datos el responsable de organización de CCOO en Granada, Daniel Mesa. "La precariedad laboral es una lacra constante en el mercado de trabajo granadino, los datos lo demuestran mes a mes: concretamente en julio el 96% de los contratos celebrados tiene carácter temporal", indicó. "En muchos, se trata de contratos en situación de fraude de ley", aseguró Mesa.