La nueva subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López Calahorro, inició ayer su primera ronda de contactos. La socialista se reunió con la delegada del Gobierno de la Junta, Sandra García y con el alcalde de Granada, Francisco Cuenca.

De este último encuentro, aseguran los dirigentes que nace una colaboración en el impulso de "los grandes proyectos" que afectan a la ciudad "desde la lealtad institucional".

López Calahorro y Cuenca mantuvieron en el Ayuntamiento un encuentro institucional y de trabajo. Cuenca, que consideró esta primera reunión como "el arranque de una vía permanente de contacto del Gobierno con nuestra ciudad", explicó que en el transcurso de la misma se abordaron cuestiones como la llegada del AVE, el estado del Museo Arqueológico y sus posibilidades de ampliación, el anuncio de convocatoria en los próximos días de una Junta Local de Seguridad o el Plan de Reforma de Integral en Santa Adela.

En este punto, Cuenca transmitió a la subdelegada la intención de la ciudad de acogerse "al Plan Estatal de Vivienda 2018-2021, que vuelve a contemplar el programa de rehabilitación edificatoria y de regeneración y renovación urbanas". Otro de los asuntos tratados durante el encuentro fue la línea eléctrica Caparacena-Baza-La Ribina, la llamada línea 400 kilovoltios. Para el alcalde, se trata de una infraestructura prioritaria para garantizar la energía actual y de futuro.

"Como sabéis, pretendemos que se incluya en el Plan Energético Nacional, con plazo 2020, para resolver problemas de sobrecarga en la red y dar cobertura a las necesidades y previsiones futuras. Estoy seguro de que el gobierno será sensible a esta demanda y hará realidad este eje eléctrico", explicó Francisco Cuenca.

Tanto él como la subdelegada del Gobierno incidieron en el compromiso de seguir trabajando desde la lealtad de ambas instituciones para establecer canales de diálogo permanente "que supongan el avance de los proyectos que mejoran la calidad de vida de todos los vecinos de Granada".