El Hotel Alhambra Palace reabre su terraza de verano y lo hace aportando sus bazas de siempre (unas vistas admirables que recogen desde Sierra Nevada hasta la catedral y la experiencia que dan 102 años de servicio profesional) y añadiendo nuevos argumentos. Entre otros, el que han denominado Cóctel Alhambra, una combinación de ginebras hechas en Andalucía junto a un chorrito de vodka, granadina, zumo de piña y zumo de naranja.

La terraza abre por las tardes y se mantiene operativa de noche. Para evitar la posibilidad de que el calor estropee una buena estancia, cuenta con un sistema de pulverizadores de agua que mantendrán siempre fresco el recinto.

Se podrá ir a beber el citado cóctel, pero también para hacer una comida informal. Sus apuestas, entre otras, son la vichyssoise de apio y puerros con huevas de arenque, la ensalada de temporada con melva canutera o el revuelto de habas baby con langostinos. Y si esa comida no es del gusto de los más pequeños, hay alternativas de las que nunca fallan, como los espaguetis a la boloñesa o la hamburguesa casera.

Con todos esos mimbres, el segundo hotel más antiguo de España aspira a tener "el balcón más de moda".