La Universidad de Granada pide que "cese el genocidio" en la Franja de Gaza

El rector de la Universidad de Granada, Pedro Mercado, comunicó este jueves al consejo de gobierno de la institución la decisión del equipo de gobierno de la UGR de recurrir en casación, la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) de 16 de septiembre de 2025 que anula el acuerdo adoptado el 17 de mayo de 2024 por el Consejo de Gobierno por el que se suspendían, "en el ámbito de la autonomía universitaria y de nuestros valores estatutarios", las colaboraciones académicas y científicas con instituciones israelíes. Así lo indica la Universidad en un comunicado, en el que señala que la institución se une a petición de otros movimientos para que "cese el genocidio" en la Franja de Gaza.

La Universidad de Granada manifiesta en este mismo comunicado, como ha hecho anteriormente en los comunicados de 9 de febrero de 2024 o de 8 de mayo de 2024 entre otros, su compromiso por la transmisión del fomento del diálogo, de la paz, del respeto a la diversidad cultural y de la cooperación entre los pueblos. En ese sentido, en el discurso de apertura del curso académico el rector Mercado, el pasado 12 de septiembre, reivindicaba el papel de la universidad como “espacio de pensamiento crítico, de diálogo sereno, de pluralidad y tolerancia, de defensa de los derechos humanos y de construcción de la paz”.

El equipo de gobierno de la Universidad de Granada, además, indica que se suma al discurso realizado por Felipe VI en la Asamblea General de las Naciones Unidas.

"Por lo tanto, nos unimos a las voces y a los movimientos internacionales centrados en la defensa de los derechos humanos fundamentales y que, independiente de su ideología política, reclaman al estado de Israel que cese el genocidio del pueblo palestino de la Franja de Gaza".

Casi dos años

La Universidad de Granada ha vivido situaciones de distinto tipo relacionadas con el conflicto en Gaza. En enero de 2024 en la Facultad de Filosofía y Letras se decidió retirar cartelería en el centro porque en los pasquines se señalaba a Israel como "Estado Genocida", postulado que ahora asume el equipo de gobierno de la institución. Esa medida en la Facultad se tomó para "evitar la confrontación entre estudiantes y profesorado de diversos países de procedencia" y tras la queja, según el Decanato, de un profesor y una estudiante. Sin embargo, con posterioridad se acordó desde el mismo Decanato el mismo centro no retirar los carteles.

Tras la acampada en mayo de 2024 y el pronunciamiento del Consejo de Rectores, la Universidad de Granada decidió suspender temporalmente las relaciones académicas y de movilidad con instituciones israelíes que no condenaran el conflicto. Ese acuerdo de consejo de gobierno fue llevado a los tribunales por la asociación Acción y Comunicación sobre Oriente Medio ACOM. El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 dio la razón a la UGR y la asociación recurrió al TSJA, que este mes de septiembre decidió fallar en sentido contrario.

Según la sentencia del TSJA, que será recurrida ante el Supremo tanto por la UGR como por la Asociación pro Derechos Humanos de Andalucía APDHA, el acuerdo de la Universidad es "discriminatorio" y "vulnera la dignidad de la persona" al estigmatizar y "de alguna manera" responsabilizar del conflicto al personal de las entidades universitarias israelíes "sin ni siquiera conocer cuál es su opinión sobre el estado actual del conflicto", lo que a juicio del Tribunal transmite "una opinión negativa sobre ellos".