Granada

Los vecinos 'guerrilleros' piden la palabra

  • La Junta Municipal de Distrito del Zaidín ya cuenta con la baja algunas asociaciones y la historia puede repetirse en La Chana · Otros portavoces no son tan radicales pero muestran sus quejas · Otros apoyan la gestión

¿Quién no ha tenido alguna vez un vecino molesto? Ese que incordia con la música a deshora, el que pone la televisión a todo volumen durante la siesta o se apodera de parte del patio común. Aunque a parte de los vecinos molestos por sus "hechos" también están los que incomodan tan sólo con sus palabras. Dentro de este grupo se encuentran los "vecinos molestos del alcalde".

Torres Hurtado tiene muchos acólitos dentro del movimiento vecinal, entre ellos, el presidente de la Federación de Vecinos, Francisco López de Haro, pero cada vez más también se encuentra detractores. Detractores que ya no sólo se quejan de pensamiento o palabra sino que también mueven ficha y actúan. Los primeros fueron los vecinos del Zaidín. Ante la falta de respaldo y consenso en el barrio y las ciertas actitudes del representante del equipo de Gobierno en el barrio, Vicente Aguilera, parte de las asociaciones mostraron su disconformidad abandonando la Junta Municipal de Distrito y creando una asamblea paralela. El gesto no es nimio. Se supone que las juntas municipales de distrito son los órganos competentes para recoger la voz de todos los vecinos que luego llega al Ayuntamiento. De esta manera, el que un distrito se disgregue implica que se deja sin voz una parte importante dentro del barrio.

La historia es que a los vecinos del Zaidín podrían sumarse parte de los residentes del distrito Chana. Hace unos días, José Fernández Ocaña, representante vecinal de la zona manifestó su intención de abandonar este órgano "ante la discriminación que sufrimos del alcalde", apuntó.

El quid de la cuestión es que aunque el descontento de los vecinos no se materialice con la posición radical del abandono de las juntas, son muchos los portavoces que se presentan "molestos" para el alcalde, en sentido, de que son reivindicativos y no están especialmente contentos con la gestión municipal. Algo que no es plato de buen gusto de cara a unas elecciones municipales.

Entre ese grupo se encuentra por ejemplo la agrupación del Bajo Albaicín. La asociación es una de las más críticas con el Ayuntamiento. Aunque sus miembros reconocen que "es importante que se arreglen calles y accesos principales del barrio pero, en el Albaicín, hay muchas carencias que llevan años sin atenderse como, por ejemplo, ser el único distrito sin centro cívico". Lola Boloix, representante de la asociación, cree que al Gobierno no le interesa que "se le reivindiquen cosas y apunta que sólo quieren que el cometido de las asociaciones se limite a las fiestas y las semanas culturales, cuando las asociaciones son otra cosa", expone.

José Antonio Castillo, representante del Sacromonte, considera que "no se oyen todas las voces por igual en relación a otras asociaciones" y que, en el caso de su zona, aunque hay peticiones que se mejoran "como es el caso de las líneas de autobuses otras, como el tema de los saneamientos sigue estancado".

También se escuchan voces discordantes en la asociación de Albayda. El último flete que tienen entre manos se debe al centro de atención a personas sin hogar que quieren poner en la zona, pero sus quejas, también se extendieron a problemas de movilidad y de falta de servicios.

Evidentemente, no todas las asociaciones se muestran discrepantes con la gestión del Ayuntamiento. Hay quienes están satisfechas con los trabajos que se hacen en el barrio. Es el caso de Carmen Nestares, presidenta de la Asociación de Vecinos del Realejo. La portavoz no podía ocultar su satisfacción la semana pasada del resultado de las obras en el barrio ahora sólo espera que se solvente el problema de la ubicación del aparcamiento del barrio. También apoya al Ayuntamiento en el trabajo que ha realizado en su barrio el presidente de la Asociación San Francisco Javier. Una de las últimas intervenciones presentadas en la zona fue la apertura de un nuevo vial que agilizaba el tráfico entre la Zona Norte y la Plaza de Toros, algo que era necesario y que el Ayuntamiento ha cumplido a la perfección.

La asociación del Alto Albaicín, las del distrito centro y algunas de las Ronda también, aunque con 'peros' moderados, muestran su lado de apoyo a la gestión municipal.

Son las dos caras de la moneda. Algunas positivas y que se ven y otras no tanto que son las que los vecinos denuncian y las que voces de la oposición, como el caso de la portavoz socialista, Ana Muñoz reflejan en las otras visitas de barrio. "Y es que no sólo las calles principales no viven todos los ciudadanos, también están las paralelas... más escondidas, pero que también están en el callejero y hay que arreglar", sentencia.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios