Los dos principales deseos que tiene un entrenador de cualquier disciplina deportiva cuando compite en la elite es que los resultados del conjunto que dirige sean buenos y poder contar con todos los efectivos de su plantel.

Robert Moreno, entrenador del Granada, puede sentirse como un privilegiado estos días, ya que no es habitual que sucedan ambas cosas a la vez, de hecho en muchos casos no se da ni una ni otra, pero el equipo que dirige está en un punto de la temporada en que es capaz de hacer coincidir ambas premisas.

Vive el cuadro rojiblanco a nivel deportivo su mejor momento del curso, con siete partidos consecutivos sin perder en LaLiga Santander que le han alejado del descenso y llevado a la zona tranquila de la tabla, y actualmente tiene prácticamente disponible a toda su plantilla, ya que sólo está en el dique seco el lateral colombiano Santiago Arias.

Tras descansar el Granada este sábado aprovechando que no tiene este fin de semana partido ni de liga ni de Copa del Rey, competición esta última en la que fue eliminado semanas atrás por el Mancha Real, los nazaríes regresaron a los entrenamientos este domingo para completar en la ciudad deportiva la primera de las cuatro sesiones previstas de cara al choque del jueves contra el Getafe.

La enfermería del Granada, llena casi hasta los topes en otros momentos del curso, se ha quedado prácticamente vacía. En el pasado choque ante el Barcelona ya pudieron reaparecer Montoro y Domingos Duarte. El primero arrastraba problemas físicos no muy graves, mientras que el luso sí que estuvo tres meses de baja por una lesión en un brazo.

A ese choque faltaron por culpa del coronavirus tanto Germán como Alberto Soro, aunque ambos ya recuperados regresaron a los entrenamientos de grupo la pasada semana, por lo que vuelven a ser jugadores aptos.

La sesión completada por el Granada este domingo sirvió para comprobar que también se ejercita ya Rubén Rochina. El polivalente jugador rojiblanco ha estado sin poder vestirse de corto mucho más tiempo del previsto por la entrada que sufrió en el tramo final del ya lejano choque ante el Levante.

La lesión de tobillo del valenciano ha sido más grave de lo esperado y le mantiene de baja desde hace ya varias semanas, aunque por fin ve la luz al final del túnel y vuelve a estar disponible, al menos trabajando con el grupo hasta que se confirme el alta médica.

Esto deja como único integrante de la enfermería rojiblanca al colombiano Santiago Arias, que sufrió una lesión muscular en el choque ante el Atlético de Madrid, último del pasado año y que se jugó hace ya casi un mes, y se encuentra lesionado desde entonces. No hay visos de que el cafetero pueda estar disponible a corto plazo, aunque lo mejor es que actualmente es el único ocupante de la enfermería rojiblanca.

Al hecho de que todos los jugadores que comenzaron la temporada en el primer equipo, salvo el citado Arias, estén disponibles en la actualidad para Robert Moreno, hay que añadir que la nómina de jugadores que puede utilizar el preparador se amplía con dos jugadores más que no estaban al principio.

Uno es el central del filial Raúl Torrente. Sí que hizo la pretemporada con los mayores, pero nadie esperaba ni su irrupción ni que esta fuera tan brillante y le llevara a quedarse a todos los efectos en el plantel principal lo que queda de curso.

El otro es Álex Collado, único fichaje invernal realizado hasta ahora por el Granada, al que llega cedido por el Barcelona, y que ya debutó, pese a apenas haberse ejercitado con el equipo, en el pasado choque ante los culés. El polivalente extremo cuenta con la total confianza del entrenador y apunta a ser un jugador importante en la segunda vuelta de la liga recién iniciada.

Dos jugadores, o más, por puesto

Todo esto, a la espera de que pueda haber altas y/o bajas en lo que queda de mercado invernal, permite al técnico catalán tener a su disposición un abanico de jugadores más amplio que nunca.

Sin contar al lesionado Arias y colocando a Víctor Díaz como lateral diestro, aunque con Robert ha actuado casi siempre como central, hay disponibles para Robert dos jugadores por puesto tanto en la portería como en cada una de las cuatro posiciones de la zaga.

Esta duplicidad de futbolistas por puesto se mantiene si se analiza el Granada desde el esquema 1-4-3-3, que es el que originalmente traía Robert en la cabeza cuando llegó a Granada. Incluso, salen tres hombres en algunas zonas para una sola posición

Hay seis centrocampistas para tres puestos; cinco extremos, metiendo aquí a Rochina y a Álex Collado para dos posiciones de banda, aunque los dos jugadores citados pueden actuar como interiores, y tres delanteros para un elegido en la punta de lanza, con la opción usada con asiduidad en el pasado de que el colombiano Luis Suárez sea utilizado como extremo.

Si se analiza la situación desde el punto de vista del dibujo usado últimamente por el Granada, que es el 1-4-4-2, la situación varía. Se mantiene igual en portería, defensa y extremos, con los citados Rochina y Álex Collado como buenas alternativas para ser segundo delantero, una hipotética nueva posición de media punta o hasta bajar al doble pivote si hay necesidad de arriesgar, pero cambia en la medular y la delantero.

En estos casos, se quedarías seis medios para los dos puestos del doble pivote y sólo tres delanteros para los dos de punta.

Ahora le tocará a Robert Moreno estrujarse la cabeza y elegir a los jugadores para el once. Incluso, si todo sigue igual de bien en cuanto a disponibilidad, hasta tendría que hacer descartes para la convocatoria.