Otro día para la historia. Será en Budapest, la capital de Hungría, y a orillas de un Danubio que más que azul está predestinado a colorearse de rojiblanco este jueves. El Granada CF de Diego Martínez parece que hasta que no ocupe todo el calendario con futuras efemérides no va a parar.

Puestos a conquistar Europa, qué mejor que poner una pica en el centro del continente. El Granada busca un pase a los cuartos de final de la Liga Europa que será tan histórico como lo fue en su día la clasificación para la Liga Europa, la superación de las fases previa y de grupos, y los pasaportes para los dieciseisavos y octavos de final.

El Granada, a por todas ante el Molde.

Enfrente, los de Diego Martínez tendrán al conjunto noruego del Molde, que hace siete días mordió el polvo en el Nuevo Los Cármenes por 2-0 pero que se niega a rendir su plaza. El Granada, por tanto, parte con una ventaja que tendrá que administrar a la perfección.

Con ventaja

El resultado del partido de ida es de los que hacen que un equipo cotice al alza, pues no sólo se consiguió una renta de dos tantos, sino que casi igual de importante fue que Rui Silva no tuvo que sacar ningún balón del fondo de su portería.

Un gol granadinista tendrá el valor del oro de muchos quilates, pues obligaría a los escandinavos a golear a unos invitados que en Europa se han hecho valer con un gran trabajo de sus líneas de retaguardia. La defensa del Granada, por tanto, tiene hoy ante sí todo un reto. Sobre todo es importante evitar lo que sucedió en Nápoles, donde se encajó un gol muy pronto que dio esperanzas a los transalpinos a las primeras de cambio. En cuanto el balón comience a rodar, el tiempo corre a favor de los hoy visitantes.

El apartado físico puede ser determinante en un encuentro en el que se miden dos equipos que están en polos opuestos en este aspecto. Mientras los jugadores del Molde han estado de pretemporada bajo el sol español durante varias semanas, los del Granada no han hecho otra cosa desde el pasado mes de septiembre que sumar y sumar minutos en sus piernas. Sobre el papel, unos, los escandinavos, están más frescos que una lechuga, y los otros, los rojiblancos, demasiado cargados.

Soldado marcó el segundo gol del Granada en el partido de ida.

Pero también está otros aspectos como son el técnico y el táctico, en los que el Granada parece estar un punto por encima de sus anfitriones. El mejor estar de los rojiblancos sobre el césped también cuenta para llevar el encuentro al ritmo que más interesa y está claro que los de Diego Martínez comenzarán el encuentro con la posibilidad de marcar el tempo.

Una expedición completa

Dado el momento histórico que puede vivir el Granada, Diego Martínez ha tomado la decisión de que viajen todos los futbolistas, incluidos los lesionados, que no son pocos, salvo Foulquier y Neyder Lozano, y los que no están inscritos para la Liga Europa.

El cuadro de jugadores que están a disposición del técnico no es tan raquítico como hace una semana, pues Germán, Montoro y Yangel Herrera cumplieron su partido de sanción y estarán en el once inicial, por lo que podrá formar el Granada de inicio con su pareja habitual de centrales, con Domingos Duarte junto al de San Fernando, y el trío de gala en el centro del campo, con Montoro y Yangel Herrera y Gonalons.

El principal problema está en uno de los puesto de lateral, ya que sólo está disponible Víctor Díaz, que jugará en la izquierda. Por la derecha podría jugar Vallejo si finalmente se recupera de sus problemas musculares. También están Nehuén Pérez e, incluso, Antonio Puertas. Otra opción podría ser la de jugar con tres centrales y dos carrileros.

Víctor Díaz, el único lateral disponible.

Entre las dudas está si podrá reaparecer Darwin Machís, tras unas semanas de baja por problemas musculares, y en si arriba jugará Soldado o Jorge Molina, o repetirán, como pasó en la ida, los dos juntos de inicio.

El Molde, por su parte, afronta el choque consciente de que tiene que remontar dos goles y evitar los errores defensivos que provocaron los tantos del Granada en la ida. Su técnico, Erling Moe, podría apostar por introducir en el once titular al joven costamarfileño David Datro Fofana y por actuar de inicio con dos puntas natos.

El Granada ya hizo historia en el Diego Armando Maradona de Nápoles y hoy puede hacerlo en otro estadio con el nombre de otro mito del fútbol mundial: Ferenc Puskas. Casi ‘na’.