Está la Real Sociedad ante uno de los mejores inicios de temporada de los últimos años. El rival del Granada CF marcha sexto en la clasificación y cuenta después de once jornadas con 19 puntos, por lo que está a solo uno del conjunto rojiblanco, que está en la tercera posición. Los donostiarras tienen como principal punto negativo su irregularidad en casa, ya que han dejado escapar algunos partidos como local en los que tenían el cartel de favoritos.

El equipo de Imanol Alguacil es uno de los que mejor fútbol practica de Primera División a través de un Odegaard que deslumbra hasta el momento desde el centro del campo realista. La Real buscará un triunfo que le permita olvidar la derrota cosechada en la jornada intersemanal a la vez que superar a su rival y consolidarse en las posiciones de privilegio de la tabla.

Irregular

Cosechó solo una derrota la Real Sociedad en las primeras seis jornadas de competición y fue en el campo del Athletic Club. A pesar de ello, el conjunto donostiarra ha perdido tres de los últimos cinco partidos que ha jugado, dos de ellos en casa. Es en Anoeta donde el rival del Granada no encuentra su mejor versión de mejor regular. El Getafe y el Levante por 1-2, dos equipos con menos aspiraciones que la Real Sociedad, han sido sus dos últimos verdugos actuando como local.

Mismo bagaje

Parten el Granada y la Real Sociedad con un bagaje prácticamente idéntico en lo que va de competición. Ambos equipos han marcado 18 tantos en once jornadas, mientras que los rojiblancos han recibido 13 y los realistas 12. Es la defensa una de las zonas del terreno de juego en la que no encuentran los visitantes su mejor nivel, ya que conceden numerosas ocasiones de peligro a favor de su rival.

Mikel Merino es una pieza clave en el esquema donostiarra.

Referente

Tiene sólo 20 años, pero es el principal referente ofensivo para la Real Sociedad. Martin Odegaard ha jugado todos los minutos en lo que va de campeonato y es el foco principal sobre el que se basa el juego de los donostiarras. El centrocampista ha demostrado el desparpajo tradicional de su edad, pero también una madurez impropia de su juventud. Capaz de crear, de dar el último pase y de llegar al área rival, los rojiblancos tienen que poner toda su concentración en detener el impacto que puede causar en el encuentro.

La base

Una de las claves del buen rendimiento inicial de los vascos es que mantiene la base de la temporada pasada. A Anoeta han llegado únicamente seis caras nuevas. Remiro en portería; Monreal y Sagnan en defensa; Odegaard y Portu en la medular e Isak en punta. Los visitantes han apostado por mantener la columna vertebral y, hasta el momento, los resultados le han dado la razón.

Sistema

Imanol Alguacil utiliza un 1-4-2-3-1 que se puede adaptar en función del transcurso del partido a un 1-4-4-2. El técnico apuesta por un fútbol de toque en el que es básica la posesión de balón. A pesar de ello, se sienten cómodos también a la contra.