El Granada CF se abona al empate a cero

El Granada CF no ganó, pero tampoco perdió. El cuadro rojiblanco empató a cero con el Cádiz, el tercero consecutivo con el mismo resultado, pese a que mereció ganar el partido. Ocasiones tuvo, sobre todo tres muy claras. Pero a este equipo le cuesta un mundo marcar un gol como ya se presagiaba tras terminar de configurar la plantilla. Lo intentó por todos los medios, pero no hubo manera.

Una jornada más, Pacheta no modificó su once inicial. Las dos jornadas sin encajar goles, aunque también sin marcar, hicieron que el burgalés no quisiera cambiar lo que funciona...al menos en parte. En un partido marcado por los graves incidentes ocurridos en la previa del encuentro en los aledaños de Los Cármenes entre supuestos aficionados al fútbol que manchan la imagen de ambas entidades desgraciadamente, el cuadro rojiblanco arrancó con un gol anulado a los cinco minutos. Tras un saque de esquina, Pau Casadesús recibió en el área de Alcaraz y remató con la diestra cruzando el cuero y batiendo a Aznar, pero el lateral catalán estaba claramente en fuera de juego.

También lo intentó Jorge Pascual de cabeza tras centro de Álex Sola, pero su intento se marchó por encima del larguero. La respuesta llegó por medio de un centro peligrosísimo de Ontiveros que se paseó por el área. El Granada CF no pasó apuros en el primer cuarto de hora, es más, jugó mucho en campo contrario, usando el cuadro gaditano la contra para tratar de sorprender.

A los 16’, Ortuño disparó duró desde unos 25 metros pero Luca Zidane atrapó sin problemas. A partir de ahí, el choque entró en una fase en la que ningún equipo quiso arriesgar. Antes de la media hora de partido, Faye le robó la cartera a Iza Carcelén, condujo el cuero sobre la línea de fondo pero su última toma de decisión no fue la más adecuada, y su centro lo atrapó Aznar con Jorge Pascual al acecho.

Los de Pacheta lo intentaban, pero carecen de esa mordiente y sangre fría en el área. Son ya once jornadas y salvo ante la Real Sociedad B, es evidente que falta gol por mucho que el técnico rojiblanco defienda a sus jugadores que, por otro lado, es su función. Pero la realidad es la que es y los números son los que son. Tampoco pudo anotar Manu Lama en el 32’ a la salida de córner. Su remate de cabeza se marchó por encima del larguero. La estrategia tampoco está funcionando.

Empero, el cuadro local se pudo adelantar en una clarísima ocasión de Álex Sola a centro, espectacular, de Pedro Alemañ. Pero el donostiarra, con todo a su favor, disparó de primeras muy alto. El Cádiz estuvo a punto de aprovechar los regalos de su rival. Fue Ontiveros, en una falta en la esquina del área, el que estrelló el esférico en la parte superior del larguero. Fue la última acción de peligro de los visitantes. Por bando granadinista, un intento de Pascual no encontró portería. Y así concluyó una primera mitad muy igualada, con alternativas y mucho control por ambos contendientes.

La segunda mitad arrancó con el Granada CF en busca de su primer gol. Lo intentó Alcaraz y, de nuevo, Lama de cabeza tras un saque de esquina, pero sin fortuna. Tampoco la tuvo Rubén Alcaraz, que pudo hacer el 1-0 a centro de Sergio Ruiz desde la esquina. El catalán conectó con su testa, pero su intento no fue a portería para lamento de aficionados, banquillo y jugadores. Los rojiblancos estaban haciendo méritos para ir por delante, sin duda.

En el 62’, Pascual no acertó en un mano a mano ante Aznar, que tocó lo justo tras recibir un pase filtrado de Alemañ, que en zona de tres cuartos es el único con ideas. Fue la tercera oportunidad clara. También se reclamó penalti por manos en el área a remate del ariete almeriense. Pero el VAR no estimó la acción como punible. Pacheta movió ficha y dio entrada a Rodelas por Sola, mandando a Faye a la derecha tras ‘reventar’ a Iza Carcelén.

Otra vez Oscar Naasei, tras una falta lateral botada por Sergio Ruiz, tuvo el 1-0. Pero no había manera. Faye siguió volviendo loca a la zaga cadista por el flanco derecho, pero Rodelas siguió en la misma línea que en Andorra, demasiado individualista. Entraron Pablo Sáenz y Gagnidze, situándose Faye de ‘9’. Quedaban diez minutos y el cansancio comenzaba a pasar factura. Por intentos para batir a Aznar no fue. Fue un quiero y no puedo. Un punto más que supo a muy poco.