Como si se tratara de la continuación de la pasada campaña, el Granada CF arrancó el nuevo curso como cerró el anterior: con un triunfo ante el Athletic Club (2-0), mostrando los mismos valores y armas que le hicieron realizar la mejor temporada de su historia, y manteniendo el hambre que caracterizó a este equipo. En un duelo con dos partes muy diferentes, los de Diego Martínez supieron sufrir en el primer acto, en el que no estuvieron del todo finos ni profundos, para sorprender a su rival tras el receso y dejar sentenciado el choque con dos tantos en cuatro minutos.

Y eso que a los rojiblancos les costó mucho generar peligro en el regreso a la competición. Fue así por la presión que el cuadro entrenado por Gaizka Garitano ejerció en la salida de balón de los locales, asfixiando a sus brújulas en la medular, Ángel Montoro y Luis Milla y anticipándose en cada acción a los jugadores de banda. Yangel Herrera no era suficiente para contener las embestidas de los vascos, que fueron de menos a más liderados por el debutante Morcillo, el mejor de su equipo en Los Cármenes y que trajo en jaque a Foulquier por banda izquierda.

Sin disparos

De sus botas llegaron las mejores acciones del Athletic Club, que si bien no disparó en todo el primer acto entre los tres palos, si rondó el área de Rui Silva que sigue siendo, pese a los cánticos de sirena de otros clubes, ese portero tranquilo y sobrio que cuajó una excelente temporada pasada. Al Granada CF le faltaba chispa en ataque, jugó a un ritmo muy lento, con imprecisiones y eso lo aprovechó el cuadro vizcaíno. Tímidos intentos de Machís y Raúl García fue de lo más destacado de unos primeros 45 minutos en los que el choque aburrió por momentos a los espectadores que, desde sus casas, presenciaron el duelo por televisión.

El cuadro de Garitano dominó el primer tiempo ante un rival con poca profundidad

Fue en la recta final cuando pasó algo más reseñable en las áreas. Primero con un gol anulado a Yangel Herrera en una acción que quedó anulada por falta previa de Germán, como mínimo, discutible. La respuesta llegó por medio de Raúl García, que disparó cruzado en el último suspiro del primer acto.

No mostraron los de Diego Martínez sus mejores sensaciones pero todo cambió tras el paso por vestuarios. Eran los mismos jugadores pero el tanto de Yangel Herrera, que sigue al mismo nivel de la pasada temporada a los 49 minutos, varió por completo el guión del choque. Un acción que llegó tras un saque de banda en la que el cuero le llegó a Montoro que dio su primera asistencia del año futbolístico para que el venezolano, entrando desde atrás con energía, rematara de cabeza para batir a Unai Simón.

Los jugadores rojiblancos celebran el tanto de Yangel Herrera que abrió el marcador.

Primer remate entre los tres palos y primer gol de LaLiga Santander 2020-2021. Cuatro minutos después, Luis Milla hizo el segundo dejando el choque sentenciado. El fichaje más caro de la historia el octogenario club se anticipó a Dani García fruto de la presión alta de sus compañeros, recuperó el esférico, avanzó y en la media luna disparó con potencia, previo golpeo en el palo, ante el que nada pudo hacer el arquero vasco. Una acción que es un reflejo del hambre de esta plantilla y de un equipo al que todo el que llega se adapta a la perfección.

Rival a merced

El 2-0 dejó 'ko' a su rival, que no fue, ni por asomo, el de la primera mitad. La confianza que dieron los dos tantos fue el principal aval para comenzar a dominar el choque, moviendo el cuero de un lado a otro. Montoro y, sobre todo, Yangel Herrera y Milla aparecieron por todas partes, asociándose pero también ayudando atrás. Una solidaridad que sigue caracterizando a los nazaríes y que ayer volvieron a poner en práctica.

La segunda mitad fue dominada por completo por los nazaríes, que tuvieron mucho más el cuero en sus botas y más confianza en su juego

Con ventaja en el marcador, y con los de Garitano muy tocados, el absoluto dueño del duelo fue el Granada CF. El técnico vasco buscó soluciones en su banquillo dando entrada a Iñaki Williams y Unai López pero el orden defensivo, ese que casi nunca falla en los pupilos del técnico vigués, bastó para no pasar por excesivos problemas. El poco rodaje debido a la pretemporada tan especial que han realizado los rojiblancos comenzó a pasar factura, pero para eso están los cincos cambios, para refrescar medio equipo como así hizo Diego Martínez que hizo debutar a Kenedy.

Williams al palo

Con una renta que defendió con uñas y dientes, el choque pudo cambiar si a un cuarto de hora del tiempo reglamentario Iñaki Williams hubiera acertado ante Rui Silva, pero el centro de Morcillo se estrelló en el palo izquierdo de la portería del portugués. Esa, un disparo de De Marcos que atajó el luso y un remate en el área de Muniain tras jugada personal, fueron las únicas opciones que dejó la zaga local al Athletic Club.

Todo igual

Se supo sufrir, aguantar el dominio del rival en el primer tiempo para asestar dos golpes en la reanudación que dejan los primeros puntos en la saca rojiblanca. Un triunfo que confirma que nada ha cambiado a nivel deportivo. Mismos valores, misma intensidad y solidaridad y misma hambre. Aspectos claves para afrontar el próximo jueves su estreno en Europa. Albania espera pero, eso sí, con un primer triunfo bajo el brazo. Sin novedad en el frente.