Alejandro Muñoz (Sevilla, 1982) fundó en 2006 un pequeño conjunto de cámara al que dio un nombre de resonancias a la vez castizas y románticas, Camerata Capricho Español. “Éramos un grupo de jóvenes que queríamos hacer música juntos, sobre todo repertorio barroco y clásico que pudiera adaptarse a un formato de orquesta pequeña”. Pero el proyecto fue creciendo. “La plantilla con la que solemos contar ahora es más amplia. De ella, además en torno al 60% son músicos profesionales y el resto, alumnos que cursan los últimos años del Superior. Nuestra sede está en Córdoba, pero tenemos músicos no sólo cordobeses, sino también de otras partes de España. De una de las cosas que más satisfecho me siento es de que el grupo haya servido de cantera para jóvenes que hoy están en orquestas profesionales tanto en España como en el extranjero o que están dando clases en conservatorios”.

Con varias grabaciones a sus espaldas y proyectos con repertorio sinfónico-coral de envergadura (Requiem de Mozart, Gloria de Vivaldi...), el conjunto ha virado en los últimos años hacia la música actual. “Estuvo en nuestras intenciones desde el principio, pero es cierto que en los últimos años hemos reforzado en nuestros programas la presencia de compositores actuales, tanto jóvenes como algunos que tienen ya una trayectoria importante. Intentamos que nuestra programación sea variada, y por eso seguimos cultivando repertorio clásico, que habitualmente mezclamos con estrenos y obras escritas para nosotros”.

Espiral - Camerata Gala. Muñoz

Hace un par de años el conjunto cambió de nombre. “Hemos tenido desde siempre una muy buena relación con la Fundación Antonio Gala. Nos cedieron muchas veces su sede para ensayar. Hace un par de años nos asociamos mediante un convenio de colaboración. Ellos son nuestros principales patrocinadores y nosotros adoptamos el nombre de Camerata Gala - Fundación Antonio Gala”.

En septiembre de 2019, el conjunto registró en el Auditorio del Conservatorio Superior Rafael Orozco de Córdoba su primer álbum para el sello IBS Classical, que acaba de ser presentado el pasado día 12. “Llevábamos tiempo con dos proyectos en mente: uno de patrimonio de compositores cordobeses y otro con música nueva. Entre los dos, nos decantamos por este último. A la discográfica le pareció buena idea. Así que lo pusimos en marcha. Aunque algunos compositores las tuvieran ya en mente o en desarrollo, las seis obras están hechas expresamente para el disco y eran inéditas”.

Los dos compositores más jóvenes representados en el CD, Rubén Jordán (1987) y José Javier Delgado (1992), estuvieron becados como residentes por la Fundación Antonio Gala. “Tenía relación con algunos y de otros nos fueron llegando propuestas en los últimos años. Queríamos que fuera un disco variado, tratando de mostrar al público diferentes vertientes compositivas de lo que se está haciendo hoy en España. Son cuatro compositores españoles y dos sudamericanos, pues tratamos de tender ese puente entre las comunidades a uno y otro lado del Atlántico. De hecho, Influence, la obra de Mónica Cárdenas, que es peruana, trata sobre eso, sobre las raíces de la música española y su relación con Sudamérica.”

Bailando con Arcos del hispano-cubano Igmar Alderete (1969), profesor de la Orquesta de Córdoba desde 1994, también plantea las vinculaciones, especialmente rítmicas, entre las tradiciones de uno y otro lado del Atlántico. Es quizás Abisal, del madrileño residente en Córdoba Juan de Dios García Aguilera (1959), la obra más cercana al universo de las vanguardias más tradicionales. La nueva tonalidad domina en el resto de obras, tanto en Alzheimer, de Rubén Jordán, escrita sobre un poema de Manuel García, como Espiral, de Raquel Rodríguez (1980) o No Questions de José Javier Delgado, compositor vinculado a la música de cine.

Alejandro Muñoz (Sevilla, 1982)

“En realidad, nada de lo que se escucha en el disco puede considerarse absolutamente innovador. Lo cierto es que recibo mucha música en estilo neoclásico y con influencia de la creación cinematográfica. Creo que es una tendencia bastante generalizada: hay muchos compositores que se están moviendo hacia estéticas más clásicas. Creo que es lógico, después de tantos años de dominio de estilos más innovadores y rupturistas”.

La Camerata Gala cerrará el próximo 18 de octubre el Festival Eutopía y Alejandro Muñoz tiene señalada ya con tinta roja la fecha del 22 de junio de 2021 en que se pondrá por primera vez al frente de la ROSS. “Un sueño. Crecí escuchando a esta orquesta desde niño y además toqué alguna vez como violinista en ella”.

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