Durante casi un cuarto de siglo el TT ha sido un referente en el universo de los coupés por su diseño purista. Ahora, Audi decide homenajearlo con una versión especial que, exclusivamente, estará compuesta por un centenera de unidades, cada una de ellas a la venta por 113.050 euros. Aunque ya pueden reservarse, serán entregadas durante el primer trimestre de 2023 y, más allá de la configuración con la que cuentan de serie, estos TT podrán configurarse como cada cliente requiera: pintura para la carrocería, tapicería, costuras, etc.

Lanzado como concept-car en el IAA de Frankfurt en 1995, tres años más tarde pasó el TT Mk1 pasó a la producción sin grandes cambios, conservando el diseño con formas geométricas y circulares, casi simétrico e inspirado en la filosofía de diseño de “menos es más” que representaba la Bauhaus. Coupé atemporal, que está más allá de las tendencias y nunca pasa de moda, en 1999 se sumaría a él la versión biplaza descapotable, siempre con techo de lona, el TT Roadster; mientras que en su segunda generación, los Mk2, el Coupé sumó las variantes S y RS.

En brillo o mate, son muchos los elementos de contraste en negro en la carrocería del TT RS Coupé Iconic Edition.

Tras tres generaciones y un cuarto de siglo, las líneas básicas de aquel coupé de finales del siglo XX aún se mantienen y se encuentran en esta Iconic Edition del RS Coupe, con guiños como la tapa del depósito, los aireadores del salpicadero circulares, la palanca de cambios…

Con la carrocería en color gris, el TT RS Coupé Iconic Edition propone muchos de sus elementos de contraste en negro. Como una parrilla brillante con marco negro mate que enfatiza la inscripción quattro en titanio mate. También cuenta con un faldón mate en negro, como las carcasas de los retrovisores. Mientras que las llantas, de 20”, están pintadas en negro brillante, como las pinzas de freno. El rótulo Iconic Edition aparece en las ventanillas traseras.

El concept-car original, como el de las imágenes, no contaba con el pequeño alerón que tendrían las unidades de producción después. En la nueva edición numerada un alerón es, también, protagonista del portón.

Esta edición numerada también tiene un kit aerodinámico del que el elemento más llamativo es el alerón trasero fijo de carbono -el primer TT recibió uno muchísimo más pequeño culminando su portón después de lanzarse comercialmente y tras llamada a taller de todas las unidades vendidas-, aunque también lo conforman el parachoques delantero con flics, el divisor frontal, el difusor posterior, etc.

En el habitáculo, el tono dominante es también el oscuro, aunque los asientos deportivos RS son bicolores con paneles laterales en cuero nappa gris combinada con Alcantara negra. Las alfombrillas tienen bordada la inscripción RS o en los paneles y puertas también vuelve a aparecer el Alcantara, con detalles en amarillo caléndula en distintos elementos como el volante.

El tono oscuro del interior lo rompen las costuras en amarillo caléndula que están presentes, por ejemplo, en los asientos.

En cuanto al motor, se corresponde con el esperado en los RS: el 2.5 TFSI de cinco cilindros que rinde 400 CV en este TT, con un par máximo de 480 Nm. Se asocia a una caja de doble embrague S tronic de siete marchas y su empuje se lleva al suelo a través de la tracción total, con un embrague multidisco que es una evolución del que estrenara el TT quattro en 1998.

La dotación de serie de esta versión se corresponde, en su mayor parte, con la de serie del RS.

El TT RS Coupe Iconic Edition acelera de 0 a 100 en 3,7 s y tiene una velocidad punta de 280 km/h. Tiene suspensión deportiva RS Plus con amortiguación adaptativa Magnetic Ride y una dirección con asistencia configurable mediante el Audi Drive Select.