Jeep presenta para el mercado norteamericano la versión más bestial jamás desarrollada de un Wrangler. Todo arranca con que el Rubicon 392 cuenta con un motor V8 de 6,4 litros con 470 CV y 637 Nm -el 75 por ciento disponible desde casi el ralentí- que, a través de una caja de cambios automática de ocho velocidades TorqueFlite 8HP75, traslada su empuje hacia el Selec-Trac, la caja transfer con cuatro modos de selección, entre ellos, una reductora de muy cortos desarrollos y, de ahí, se lleva continuamente a las cuatro ruedas. El Jeep Wrangler Rubicon 392 acelera así de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos.

Cuenta con llantas de 17” y neumáticos de 33” que le llevan a convertirse en el Wrangler más capaz de todos los tiempos con una altura libre de 26 cm o una capacidad de vadeo de 82,5 cm gracias a que la admisión de aire incluye conductos de hasta tres niveles que son capaces de impedir la entrada de agua al motor.

Incluso el chasis, con largueros reforzados, se ha optimizado en este Jeep que tiene los ejes más gruesos del catálogo de la marca o desconexión de la estabilizadora para las situaciones de máxima exigencia.

Otros recursos muy especiales se encuentran en la transmisión, ahora con levas de cambio de aluminio en el volante, como novedad en lo que respecta a su manejo; o modos Sand y Rock que permite maximizar la capacidad de tracción, incluyendo un bloqueo del eje trasero si está trabajando en 4WD High.

La comercialización fuera de los Estados Unidos sólo se llevará a cabo en Oriente Medio, donde podría llegar a finales del año que viene.