España envejece y no sólo en su parque móvil ante la imposibilidad de renovarlo por el precio de los vehículos y las economías familiares. Envejecen los coches y envejecen sus conductores. Con el consiguiente riesgo que ello conlleva. La edad media de España ha pasado de los 33 años en 1975 a los 44 en 2022. Y, a pesar de que en nuestro país no existe límite de edad para seguir conduciendo, a partir de los 65 se aumenta la periodicidad con la que se debe renovar el permiso, pasando las pertinentes pruebas de capacidades físicas y aptitudes. 

Según apuntó la subdirectora general de Formación y Educación Vial de la DGT, María José Aparicio, "el 30% de los fallecidos en accidentes de tráfico en la Unión Europea son mayores de 65 años (hasta el 50% si nos centramos únicamente en peatones o ciclistas). De ahí que el examen psicotécnico con revisión de vista y audición en el Centro de Reconocimiento de Conductores se antoja vital. Pero no es suficiente. Desde la revista de la DGT advierten que existen una serie de enfermedades y dolencias incompatibles con la conducción. Problemas de salud que impiden que unas 26.000 personas no puedan renovar su licencia cada año.

Enfermedades que te inhabilitan para conducir

A partir de los 65 años hay que renovar el carnet de conducir cada 5 años.

Según recoge el Reglamento General de Circulación, en el Anexo IV del Real Decreto 818/2009, se especifican las aptitudes psicofísicas requeridas para obtener o prorrogar la vigencia del permiso o de la licencia de conducción y las enfermedades y deficiencias que serán causa de denegación o de adaptaciones, restricciones de circulación y otras limitaciones en la obtención o prórroga del permiso o la licencia de conducción. Enfermedades vasculares, cardiacas, psiquiátricas, neurológicas, endocrinas, digestivas, respiratorias, oncológicas, crónicas y degenerativas.

Preocupan especialmente los problemas psíquicos, ya que se estima que el riesgo de que un conductor de edad avanzada y con los primeros signos de esta enfermedad degenerativa cometa una infracción o se vea involucrado en un accidente es de 2,5 a 8 veces mayor que en personas sanas.

• Enfermedades psíquicas: ansiedad, depresión, trastornos de personalidad, demencias, TDH, trastorno del sueño, abuso y dependencia del alcohol y drogas
• Enfermedades vasculares: aneurismas y disección
• Enfermedades crónicas y degenerativas: alzheimer, ELA, temblores esenciales, esclerosis múltiple, distrofia muscular, parkinson, artritis reumatoide, enfermedad pulmonar obstructiva crónica y osteoporosis.
• Enfermedades cardiacas: arritmias, portadores de desfibriladores automáticos, marcapasos o prótesis vasculares.
• Enfermedades respiratorias: apneas y disneas.

En caso de no cumplir con estas normas establecida por la DGT te expones a una multas de entre 200 y 6.000 euros siempre y cuando no cuentes con el pertinente informe médico avalando tu capacidad para conducir.