El ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian, señaló ayer que todos sus socios europeos, incluida España, han anunciado su intención de participar de manera concreta en la lucha contra el terrorismo, y aseguró que su país se encuentra haciendo "un inventario de las posibilidades" según la situación de cada uno.

"El conjunto de países de la UE han mostrado su apoyo concreto a Francia. Por un lado, cierto número de Estados va a participar en los ataques, en territorio sirio e iraquí. Los británicos se lo están pensando. No son los únicos", indicó en la cadena I-télé.

Otros países, añadió, en función de sus medios y de su normativa jurídica, van a poder aportar apoyo logístico para ayudar a Francia en esta situación, y otros van a aliviar el esfuerzo militar francés en otros escenarios, como por ejemplo África. "Todo el mundo necesita a todo el mundo", indicó el ministro, según el cual todos los que quieran participar "son bienvenidos" y "cada uno tiene su papel".

Le Drian destacó que su país está sosteniendo el frente de Mali, el francés y el sirio, y que no tiene previsto reducir sus efectivos en ese primer país, donde, afirmó, hay actualmente una operación en marcha en el norte porque "la fuerza Berkane actúa todo el tiempo". "Aquí entran en juego los españoles. Vamos a ver lo que proponen. Evidentemente si las fuerzas europeas vienen en apoyo y relevo de las fuerzas francesas es lo que debe ser, es la Europa de la Defensa en marcha", añadió el representante galo.

El Ejecutivo de Mariano Rajoy estaba en disponibilidad de enviar un mayor despliegue militar al Sahel y a la República Centroafricana para relevar a las tropas francesas y que estas centraran sus esfuerzos en la guerra contra el Estado Islámico, informó el jueves el diario El País. Sin embargo, Moncloa aseguró que no había hecho ningún ofrecimiento.

El portaaviones Charles de Gaulle ya está posicionado en el mar Mediterráneo, como parte de la decisión de Francia de ampliar los ataques aéreos contra los yihadistas en Siria. Los aviones de combate estarán dispuestos para operar a partir de hoy, dijo Le Diran.

Poco más de una semana después de los atentados yihadistas en París, en los que murieron 130 personas, la venta de banderas en el país se ha duplicado y nueve de cada diez ciudadanos dicen sentirse reflejados en ese símbolo.