Sonidos, sílabas y palabras, queriendo formar frases y versos entrelazándose... Ésa es la idea central que el artista lisboeta Bruno Delgado quiere remarcar con la exposición Desiertos. Retratos y Horizontes.

La exposición-poema propuesta por el Centro Municipal de Arte Joven del Ayuntamiento de Granada, se posiciona en contra de la idea de serie fotográfica, en el que la unidad temática juega el papel de dudoso argumento, sirviéndose de la repetición del motivo central como justificante de la ausencia, en muchas ocasiones de "intención, belleza, o sentido alguno, explicó delgado en su particular manifiesto de intenciones.

"La fotografía contemporánea tiende a confundirse cada vez más con la publicidad, por su intención de hacerse vehículo de ideales, por su tratadi artificioso de la imagen, y por su pretenciosa espectacularidad y su uso hiperbólico del color", recalca Delgado.

La exposición que el fotógrafo ahora propone resume como desde sus antípodas, se asume como una colección de instantes que no buscan transmitir significado alguno, ya sea oculto o declarado. El autor manifiesta que "las imágenes no competirán por perdurar en la memoria del espectador, sino que estas piezas se puedan percibir de un modo no figurativo". El sentido y la esencia de la que el espectador podrá empaparse será la de precisamente, lo contrario, es decir, la capacidad que tienen las fotografías de hacerse olvidar instántaneamente en lo que respecta a sus aspectos formales.

Delgado quiere dejar claro que su obra es muy diferente a las demás, ya que "al entrar en una exposición, nos encontramos con imágenes que se abalanzan sobre nosotros, intimidandonos y queriendo dejar a toda costa su huella en nuestro interior", mientras, que esta vez, el autor ofrece a su público unas imágenes a las que podrán "acercarse sin temor, o bien ignorar, sin sentimientos de culpa por no haberse detenido atentamente ante ellas".