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Cabaret para el verano

  • Laviebel lleva este mes dos espectáculos al anfiteatro de La nube, 'BODart' y 'El escenario ambulante'

Dos familias enfrentadas desde tiempo inmemoriales, tanto que ni siquiera se recuerda el motivo que dio origen a la disputa. En medio de esa tierra yerma, de forma milagrosa, nace una flor. Dos descendientes de cada familia se enamoran, y olvidándose del enfrentamiento deciden contraer matrimonio.

El argumento arriba descrito puede recordar al de Romeo y Julieta pero también es el de BODart (Bodas Organizadas Desordenadamente pero con arte), uno de los espectáculos que la compañía granadina Laviebel Cabaret lleva a los teatros este verano. Al frente se encuentra Emilio Goyanes, director y guionista, quien reconoce la similitud entre ambas historias aunque la obra de Shakespeare no fue fuente directa de inspiración pero sí se dio cuenta de la similitud cuando estaba escribiendo.

Una de las principales diferencias entre BODart y Romeo y Julieta es "la cuarta pared", una metáfora teatral que viene a simbolizar la separación existente entre los actores y el público durante una representación. Según Emilio Goyanes, "la cuarta pared está totalmente destrozada". En su espectáculo, los asistentes son un actor más, tanto que ocupan el lugar de las familias de los novios, por lo que deberán sentarse en un lado u otro de la iglesia en la que se transforma el anfiteatro de La nube (Palacio de Congresos), lugar en el que se desarrollan las funciones. El público, como reconoce Goyanes, está encantado de formar parte de la historia, pues "se apuntan a ese juego con mucho gusto".

Junto a BODart, Laviebel también ameniza las calurosas noches de agosto con El escenario ambulante, una historia que tiene mucho de biográfica. Aquí no hay bodas, ni familias enfrentadas, sino tres artistas de variedades (un actor, una actriz y un pianista) que tras varios años anclados en un "garito portuario" deciden soltar amarras y lanzarse en busca de nuevos proyectos. Ahora se encuentran a la deriva, dejándose guiar por las olas y llevando sus actuaciones allá donde les dirija el mar.

Irónicamente, el agua impidió a los granadinos disfrutar de este espectáculo, pues la lluvia obligó a cancelar la representación fijada para esta semana.

A pesar de ese contratiempo, Goyanes se muestra optimista, pues BODart está siendo un éxito. Hasta que llegue ese momento, los granadinos podrán disfrutar con un spin-off de Laviebel, Reinvention Tour, de la compañía MiaLam dirigida por Nerea Cordero, una de las integrantes actuales del grupo de cabaret. Ella define lo que se verá sobre el escenario como un "cabaret contemporáneo, un concierto diferente", ya que se mezclan músicas de todos los géneros con magia, humor y un sinfín de artes escénicas.

Aquí la cuarta pared está un poco menos destrozada. En lugar de hacer partícipe al público, lo que ocurre es que la acción se sitúa "alrededor" de este. No es un espectáculo interactivo, donde se necesite la ayuda de los asistentes, lo que no impide que los miembros de MiaLam abandonen el escenario y se muevan libremente por todo el anfiteatro.

El grupo de Reivention Tour está compuesto por cuatro miembros: Nerea Cordero (cantante), Joaquín González (piano), Miguel Pimentel (contrabajo), Javier Viana (percusión). Nada que ver con los más de quince miembros entre actores y músicos, que integran Laviebel.

No es extraño. La compañía de Emilio Goyanes cuenta ya con 23 años de vida, casi tantos como espectáculos compuestos (22) y un sin fin de reconocimientos, entre los que se encuentran dos Premios Palma del Río, dos Premios MAX o cuatro Premios Musical de Teatro de Madrid. Sin olvidar las giras internacionales que les llevaron hasta Francia y Portugal, incluso a cruzar el charco para visitar Cuba y Ecuador.

Tras tantos años, es lógico pensar que la escasez de ideas terminará por llegar, pero "la necesidad de vivir de tu trabajo" es lo que impulsa a Emilio Goyanes a seguir adelante con su proyecto y a no quedarse quieto, sino a continuar al pie del cañón, con proyectos que animan a los espectadores a bailar, a cantar, a unirse a la fiesta o a ayudar a una joven pareja de novios a contraer matrimonio pese a las disputas entre sus familias.

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