¿Cómo leer entre imágenes las líneas de Lorca? Las navajas enfurecidas de la Reyerta o la inquieta sombra de la cintura del Romance sonámbulo han sido objeto de estudio de los alumnos de Primero de la Facultad de Bellas Artes de Granada. El resultado, la interesante exposición que acoge hasta el próximo 13 de diciembre el Centro de Estudios Lorquianos de Fuente Vaqueros. Romancero de cartel muestra 53 carteles con la particular visión de cada estudiante.

La hoja de una navaja sangrante, reluciendo como un pez, las ruinas de un cortijo, una guitarra sobre un telón de lunares o una composición en la que Lorca aparece asomado a una luna brillante son algunas de las propuestas.

La iniciativa, que partió del profesor Carmelo Trenado, proponía a los estudiantes de Primero todo un reto, "dejar a un lado los pinceles para componer un trabajo que trascendería el aula" cuando sólo llevaban cuatro meses de formación. El primer paso fue escuchar el Romancero.

"Mi gran amigo Antonio Carvajal", explica Trenado, "se acercó a clase y, a través de la lectura de Lorca, supo acercar al poeta y su obra literaria a los alumnos, explicando todo aquello que pudiera tener interés en el trabajo que tenían que realizar".

Después del primer acercamiento, con motivo del 80 aniversario de su publicación, a los estudiantes les tocaba experimentar. "Han utilizado materiales de todo tipo: soportes como hojas de aluminio, acetato, fotocopias, fuentes de internet que interesan para vertebrar el espacio". Han roto con el soporte convencional utilizando e incorporando diferentes elementos, manipulando imágenes o transparencias.

El objetivo era utilizar elementos físicos y de referencia que acercasen el personaje de Lorca al público. Imágenes, colores, temas. "Nuevos materiales que el alumno nunca ha utilizado y que evalúa la capacidad expresiva que tiene cada uno" y que aún en la muestra pueden notarse en las yuxtaposiciones de recortables, por ejemplo, como una lectura didáctica de todo el proceso.

Imágenes confeccionadas de Lorca a través de la interpretación de su figura, o en un contexto espacial donde está depurado todo el escenario y se desenvuelve un retrato clásico del poeta, pero siempre en el contexto de la propia concepción de la obra que tiene cada alumno, como argumenta el profesor de Bellas Artes.