Retorno a Hansala, el proyecto cinematográfico "más ambicioso" de la directora granadina Chus Gutiérrez, ha sido seleccionada para participar en el Toronto International Film Festival que comenzó ayer. Retorno a Hansala es una road-movie rodada en tres lenguas (español, árabe y bereber), entre dos continentes y que se proyectará por primera vez el próximo 10 de septiembre dentro de la programación oficial del Festival de Toronto. La cinta plasma lo que suponen las fronteras, únicamente humanas, que separan, con límites físicos y morales, presuntos paraísos de la realidad de los más desfavorecidos. "Antes de rodar esta película no sabía que existía gente como la de Hansala, tranquila, solidaria, de una inocencia pasmosa y sorprendente. Sin la gente de Hansala nunca hubieramos podido rodar esta película", explica Gutiérrez.

Retorno a Hansala también es un viaje moral, un viaje que emprenden sus protagonistas, un viaje de gran intensidad en el que juntos superarán sus miedos y establecerán un fuerte vínculo emocional. Un viaje en furgoneta que llevará a Martín y a Leila desde Los Barrios (Málaga) hasta Hansala (Medio Atlas de Marruecos), durante el que se toparán de frente con las verdaderas víctimas de las fronteras entre los países, las víctimas de la desigualdad y la hipocresía del mundo en el que vivimos.

El séptimo filme de Chus Gutiérrez (Sexo Oral, Poniente, El Calentito) ha sido coproducida por Antonio Pérez (Maestranza Films) y Carlos Santurio (Muac Flms). Entre su reparto destacan actores como Antonio de la Torre (ganador del Goya 2007 por Azuloscurocasinegro), Antonio Dechent (Alatriste, Salvador), Cuca Escribano (Poniente, El camino de los ingleses), César Vea (La Torre de Suso), y los protagonistas José Luís García Pérez (Cachorro, Siete mesas de billar francés) y la joven actriz de origen marroquí Farah Hamed, debutante con esta cinta y seleccionada tras un casting de más de 200 aspirantes.

Este rodaje ha supuesto para la mayoría de sus participantes algo más que una experiencia profesional, una experiencia humana "enriquecedora". "Estoy encantado de haber participado en este proyecto y de trabajar con Chus; me ha dado la oportunidad de trabajar en una road-movie, un género poco habitual en el cine español, cuyo característica más excitante es que nunca sabes con certeza que te va a pasar en el camino, y eso te obliga a afrontar los problemas de diferente manera", explica José Luis García Pérez. Por su parte, Farah Hamed asegura que la película ha supuesto "una ampliación del concepto mutirracialidad". "Yo soy de padres marroquíes y criada en España, por eso siempre he tenido muy presente la multiculturalidad, pero estar aquí en Hansala, hacer este viaje, es un paso más".

Retorno a Hansala está inspirada parcialmente en varios hechos reales. La película narra la historia de Martín (José Luís García Pérez), un empresario funerario con problemas económicos, que encuentra en el cadáver de uno de los muchachos muertos en el Estrecho un número de teléfono.

Así entrará en contacto con Leila (Farah Hamed), la hermana del fallecido, una joven inmigrante que tratará de repatriar el cadáver de su hermano. Martín, viendo las posibilidades de negocio, partirá con ella hacia su aldea con la idea de obtener el máximo beneficio de otras familias que reconozcan a sus muertos a través de sus pertenencias, topándose con la realidad del Atlas marroquí.