Luis Vilamajó es el director invitado al concierto del X Aniversario del Coro de la Orquesta Ciudad de Granada, que se celebrará hoy a las 12:30 horas en el Auditorio Manuel de Falla. Además de Vilamajó, Puri Cano, al piano, y José Manuel Ruiz, recitador, son las otras dos figuras destacadas de la actuación de esta mañana.

"Cuando me pidieron que seleccionara algunos poemas para un concierto-recital del coro de la OCG que incluiría, por un lado, polifonía religiosa del siglo XIX y, por otro, obras de compositores contemporáneos a partir de textos de Federico García Lorca, dado lo heterogéneo de la propuesta, la única forma que se me ocurrió de unificar ambos extremos fue con el largo poema del propio Lorca Oda al Santísimo Sacramento del Altar", cuenta Vilamajó.

"Con esta obra, conseguíamos enlazar la temática religiosa de la primera parte con la figura protagonista de la segunda. Por lo demás, el poema, dividido en cuatro movimientos, "exposición", "mundo", "demonio" y "carne", en la solemnidad que le proporciona el verso alejandrino en el que está compuesto, tiene algo de cantata recitada", explica el director, quien destaca que algunas de sus partes llevan como epígrafe fragmentos litúrgicos (el pange lingua, el agnus dei), que lo vinculan directamente con la música religiosa. "Pronto surgió la posibilidad incluso de cantar dichos fragmentos antes del recitado a modo de cita inicial, tal y como aparecen, de hecho, en la edición del poema, de forma que la música y la poesía se entreveraran de un modo aún más definitivo".

En su opinión, la Oda al Santísimo Sacramento del Altar, igualmente desde la estética de su tiempo y de su autor, "a poco que se tenga oído y sensibilidad y no demasiados prejuicios, transmite una intensa espiritualidad: un clamor extrañado, una petición de amparo al Sacramento ante el dolor y los males del mundo". "Realizamos un salto estético notable, pero solo para comprender el juego de continuidad entre formas y contenidos en la música y la poesía de inspiración católica en Occidente: el "cuando te vi, Dios fuerte, vivo en el Sacramento" de Lorca se entrelaza con el "inestimabile sacramentum" de Bruckner, generando un eco a la vez de tradición y de novedad. El director resume que el objetivo del concierto-recital es describir "un arco que parte de una estética religiosa ortodoxa, que asciende por el camino de la religión hasta la vanguardia, que prosigue en la vanguardia ya puramente profana, con las composiciones de Rautavaara, y termina con obras profanas de carácter más ortodoxo, con Vila y Juan-Alfonso García".